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Buenas tardes, compañeros y compañeras.
¡Qué ovación! La verdad que me llena de alegría, pese a que hoy es un día que, como todos sabemos, es un día de conmemoración y de honra, no sólo a los mártires de Chicago, sino a todos los compañeros trabajadores y trabajadoras que en este país han luchado por una mejor calidad de vida del conjunto de la clase trabajadora a la que representamos. Como jubilada clasista agradezco el calificativo de infaltable con respecto a estar allí todos los miércoles. Entendemos que este es un compromiso insoslayable, pero es un compromiso no solamente con nuestras condiciones de vida como jubilados, es un compromiso para los trabajadores activos porque, como bien señalaba nuestro compañero Busch, las condiciones de trabajo hoy en día son inseparables de las condiciones de los jubilados. Es así y cabe señalar que los actuales trabajadores activos sufren y padecen el permanente sometimiento y salvaje exigencia de las condiciones de trabajo.
Sabemos que las ocho horas de trabajo se han virlado, pese a que han llevado una lucha histórica, y que hoy en día trabajan a destajo para poder llegar a fin de mes. Se trabajan horas y horas. Pero, además de todo, eso sucede que hay despidos, suspensiones. Toda esta situación, indefectiblemente, se vincula con el aspecto de las jubilaciones. ¿Y por qué lo señalo? Porque por cada trabajador que se despide, por cada trabajador que se suspende, por supuesto que la caja de jubilaciones se ve corroída por la falta de ingresos, a lo cual le tenemos que sumar el recorte de los aportes patronales. Por eso mismo digo y afirmo que no solamente se ve afectada la realidad de hoy, nosotros jubilados, sino la realidad de los trabajadores actuales y futuros, porque la caja jubilatoria cada vez es más chica. Y como si esto fuera poco, nos encontramos con un decreto, a nivel de este gobierno hambreador y liberticida, que ha determinado cuáles son los aumentos que podemos recibir. Que, por otro lado, nos ha quitado los medicamentos sin cargo. Que a su vez ha eliminado la prórroga a la moratoria, con lo cual 240.000 mujeres y hombres no se van a poder jubilar en este año. Y, además, se han burlado cuando nos han otorgado (desde ese congreso mentiroso, ficticio, donde todo se arregla entre los radicales, radicales con pelucas, kirchneristas, macristas, y podemos seguir nombrando una larga lista), nos quitaron la oportunidad de recibir un mínimo reajuste, que nos quitaron en diciembre de 2023. Ahora encima el gobierno lo vetó. Como viene vetando todo reconocimiento, por más mínimo que sea. Porque no estamos diciendo que es un gran reconocimiento, es una miseria, es una migaja, pero hasta la migaja nos quitan, no sólo los remedios, no sólo el derecho a la salud. Y esto también se liga con la necesidad de la lucha de los trabajadores y de la unidad de la lucha de jubilados y de trabajadores. Porque son los futuros jubilados de nuestro país y no se van a poder jubilar. Esta es la realidad, un derecho conquistado a lo largo de toda la historia.
Por eso mismo, sostenemos que la unidad en la lucha, la unidad de los jubilados con los trabajadores. Que nosotros jubilados no solo tenemos que ir los miércoles al gran hecho del Congreso a reclamar, sino también debemos ir a las fábricas, a las escuelas, a los colegios, para explicar esto: que, por cada trabajador despedido, suspendido, precarizado, desocupado, la jubilación cada vez se achica más y esto es más miseria, más miseria para todos.
Por eso, compañeros, luchamos como jubilados, luchamos por los medicamentos gratuitos o sin cargo. Por eso luchamos por el PAMI y el ANSES a mano nuestra, que también lo están vaciando, porque recortan los servicios, las prestaciones. Pero por sobre todas las cosas tenemos que generar la unión suficiente y necesaria para derrotar este gobierno, para alcanzar, al fin de todo el esfuerzo que pongamos, para alcanzar una huelga general, que nos permita ganar los espacios de decisión y de poder y donde finalmente gobernemos los trabajadores porque somos los constructores de un país, de una nación y de todos los pueblos del mundo.
Muchas gracias, compañeros.
1° DE MAYO | Intervención de Sara Daneri - Jubilados Clasistas