Escribe Pablo Busch
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Los trabajadores de la pesca, del SOMU de Puerto Madryn, convocaron a una movilización contra la decisión de las patronales de no participar de la prospección de langostino convocada por el Consejo Federal Pesquero. La prospección es la etapa previa a la temporada de pesca, pero las empresas dueñas de los barcos y de los permisos de pesca se niegan a participar, hasta que los marineros del SOMU acepten una rebaja del 30 % en el premio de producción del convenio.
El viernes 23 de mayo al mediodía vence el plazo para que las empresas con buques congeladores tangoneros y barcos fresqueros de altura nominen embarcaciones, ofreciéndolas para realizar la prospección convocada por la Subsecretaría de Recursos Acuícolas y Pesca, pero todo indica que por el lockout patronal no habrá la cantidad suficiente de embarcaciones inscriptas y consecuentemente la prospección fracasará. Sin ese relevamiento, la autoridad de aplicación carecerá de elementos técnicos para definir una apertura de la pesquería de la especie langostino en aguas de jurisdicción nacional. La temporada entrará en un terreno aún más incierto y con serio riesgo de que este año no se lleve a cabo.
Los barcos, la logística y las plantas procesadoras de langostino de Madryn llevan más de ocho meses sin actividad. Por eso a la movilización, que fue masiva, se sumaron representantes de estibadores, mecánicos navales, trabajadores del parque industrial de Puerto Madryn pertenecientes al STIA y trabajadores de las logísticas. La movilización sacudió la escena política de Puerto Madryn, una ciudad profundamente ligada a la pesca, una de las principales actividades exportadoras de la provincia del Chubut.
La movilización, originalmente convocada por agrupaciones opositoras a la conducción nacional, terminó siendo acompañada por la conducción del SOMU Nacional, que además convocó a movilizaciones en varias ciudades pesqueras del país (Bahía Blanca, Mar del Plata). Según el portal partedepesca.com, se debe a que la conducción del SOMU se vota este mismo año, y el peso de las corrientes opositoras a Durdos es relevante.
La paritaria del SOMU integra un primer lote de negociaciones en las que el Gobierno pretende imponer el cepo del 1 %. En el día de ayer volvió a realizarse una audiencia paritaria entre las principales cámaras del sector pesquero, el SOMU (Sindicato Obreros Marítimos Unidos) y el Ministerio de Capital Humano. El Sindicato rechazó la oferta de un aumento irrisorio del básico: aumentos del 1,2 % para los meses de abril y mayo, y del 1 % para junio y julio. El SOMU denunció una maniobra de las empresas Pesquera San Isidro SA, Riminimarr SA, Conarpesa SA y Agropez SA, acusándolas de incumplir con la retención de aportes sindicales. En el medio de las negociaciones, en conciliación obligatoria, el Gobierno de Milei acaba de dictar la esencialidad para la actividad pesquera, lo que da por terminado el reconocimiento legal del derecho de huelga.
La posición del sector patronal fue enunciada desde febrero por el presidente de Conarpesa, Fernando Álvarez Castellano, que planteó la necesidad de que “se profundice la discusión sobre los valores de ‘producción’ de las tripulaciones de los barcos congeladores tangoneros de cara a la próxima temporada de langostino de aguas nacionales. Venimos con dos años con precios a la baja. Nadie dice que bajen los sueldos a la gente, sino que la discusión está en pedir la baja en el valor de producción. No es muy difícil de entender que cuando se fijaron esos valores de producción el langostino estaba a 12 dólares y ahora está a 6 dólares. Desde el SOMU no lo entienden o no lo quieren entender, pero está claro que lo van a tener que entender”. “en estas condiciones no va a salir ningún barco congelador. Si no me da el número no voy a sacar los barcos congeladores. Este señor (Juan) Navarro del SOMU dice que esto es un lockout patronal, salir a perder no es un lockout patronal”
La movilización masiva de trabajadores de Puerto Madryn se suma al contingente de trabajadores que salen a la lucha contra el cepo salarial del Gobierno, con los choferes de la UTA y los docentes a la cabeza.
El SOMU es un polvorín Las patronales reclaman una rebaja salarial del 30% para arrancar la temporada. Por Pablo Busch, 13/05/2025.