Tiempo de lectura: 1 minuto
El viernes 29 de noviembre la patronal de Pirelli despidió sin causa a 14 trabajadores y la dirección del SUTNA respondió con quemas de neumáticos y un piquete de algunas horas en el portón principal de la fábrica. Estos despidos se suman a la veintena de despidos encubiertos bajo el rótulo de “despidos voluntarios” que la patronal llevó adelante semanas atrás.
En el último pelotón de despedidos se encuentran compañeros que apoyaron vivamente el cese de actividades, el pasado 20 de octubre, impulsado por el SUTNA en el marco de la negociación paritaria, para repudiar los “retiros voluntarios”.
Según varios testimonios recogidos en puerta de fábrica, la zaga de despidos continuaría con supervisores y jerárquicos. Muchos trabajadores denuncian que la empresa se está deshaciendo de los trabajadores que tienen categorías, antigüedad y vacaciones que exceden las dos semanas, para reemplazarlos por trabajadores encuadrados en la nueva ley laboral (Ley de Bases).
Estamos en presencia de despidos sin causa que apuntan a amedrentar al colectivo obrero, dividirlo y disciplinarlo, para poder avanzar en las modificaciones de las condiciones de trabajo más conveniente para la patronal.
Los trabajadores de la industria del neumático enfrentan una ofensiva del conjunto de las patronales que pugnan por profundizar la flexibilidad laboral para aumentar la tasa de explotación y la tasa de ganancia a costa del salario y la salud de los trabajadores.
