Escribe Diego Carrazán
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A menos de 20 días del inicio de la campaña financiera, queda claro que la misma arrancó con buen vigor. Por un lado, se concretaron tres brindis de fin de año -en capital, en el Este y en el Sur-, contando con una buena presencia de compañeros internos e invitados.
Los brindis nos sirvieron, además para clarificar el escenario político internacional y nacional, para buscar seguir sumando en nuestra campaña por la presentación de una lista de Política Obrera para las próximas elecciones nacionales de medio término en la provincia. De hecho, en todos los brindis hemos podido reforzar el ingreso y el trabajo con las adhesiones y las afiliaciones.
Al día de hoy, miércoles 1 de enero de 2025, ya hemos superado holgadamente el 60 % de nuestro objetivo financiero propuesto para esta campaña. Un dato fundamental para este logro es que hasta la fecha, más de la mitad de los aportistas que no pertenecen al partido y dieron su aporte para esta campaña están vinculados al ámbito de la educación. Esto, por un lado, refleja el fuerte trabajo político desenvuelto por nuestros compañeros y las organizaciones vinculadas con nosotros en Adiunt; y, por otro, anticipa las condiciones de nuestras de intervención en un escenario de lucha sindical y electoral en el sindicato de docentes universitarios, como así también entre los docentes provinciales, que han visto otro año más de deterioro salarial y de la juventud universitaria, que ha sabido dar muestras de una poderosa lucha independiente en 2024.
La campaña financiera tucumana también cuenta con una planificación de una decena de obreros cosecheros, de obreros de grandes fábricas, de obreros de los ingenios y de trabajadores de la salud, donde también tenemos una fuerte apuesta. Los núcleos del Polo Tendencia también se han sumado a esta campaña financiera y en algunos casos se realizarán actividades grupales que permitan recaudar montos extras para nuestro partido. Teniendo en cuenta que son el sector que más ha acusado el golpe económico del gobierno, porque el gobierno nacional ha reducido a casi la mitad sus planes y ha dejado de enviar mercadería, es un hecho políticamente muy saludable.
Un dato no menor es que una buena parte de los aportistas a esta campaña financiera han aceptado ser aportistas permanentes a Política Obrera. De continuar esta tendencia nos sería muy provechoso ya que nos permitiría reforzar los recursos para afrontar el último tramo de la campaña por la legalidad, los gastos corrientes y una agitación en las principales fábricas y lugares de trabajo con los recursos necesarios.
La campaña financiera está en pleno desarrollo para buscar concretar desde los objetivos financieros trazados y también los políticos, abrir nuestra periferia y clarificar en ella el rol de la clase obrera en un escenario de guerra mundial imperialista, con Milei como un activo de esta guerra, los partidos “opositores” del parlamento siguiendo la política de Milei, otro tanto las burocracias sindicales, que bloquean el paso a una construcción independiente de lucha, y del FIT-U, empecinado en hacer seguidismo a la burocracia para que encabece cualquier proceso de lucha.
El gran desafío es poder llegar a todos los sectores y ganar el apoyo económico de los explotados a nuestro partido, mediante la propaganda y una intensa participación en la lucha de clases.