Jubilados: la represión se agrava, la lucha se redobla

Una continua marea de trabajadores y jubilados comenzaron a marchar al Congreso Nacional desde la mañana del miércoles 6 de agosto.

Flameaban las banderas de los trabajadores del INTI, del INTA, de Vialidad Nacional en contra del desguace del Estado, contra los despidos y por salarios que alcancen una canasta familiar, hoy en $2.500.000. Estaban los trabajadores del Garrahan en una tenaz lucha por la falta de recursos, reclamando por la emergencia pediátrica. Marchaban los universitarios por el presupuesto para sus lugares de estudio, estaban ´los discas´, así como los jubilados, luchando a brazo partido contra los vetos a sus respectivas leyes votadas en el parlamento, con algunas mejoras insuficientes, pero que este gobierno liberticida en defensa de los intereses de los tenedores de la deuda pública ha vetado.

El operativo policial no se hizo esperar. Con las directivas de un gobierno que no permite un solo manifestante en las calles y ahora tampoco en las veredas contra su política de hambre y miseria. Cierran Avenida de Mayo por el temor de que la marcha se dirija a Plaza de Mayo.

Como ya no alcanzan los palos, los gases y las balas de goma, ahora incorporaron los carros hidrantes, modernizados con un ingrediente tóxico en el agua, que lanzaban chorros contra jubilados, trabajadores y fotoperiodistas que cubrían la protesta. Estamos frente a un gobierno signado por las directivas del FMI, que pretende profundizar día a día el ataque contra trabajadores y jubilados, ahora con una “oposición” que venía colaborando con el plan motosierra y que producto de las presiones populares le ha propinado un par de derrotas en el parlamento, con leyes todavía insuficientes frente a las reales necesidades del conjunto de los trabajadores.

Ahora es el justo momento para impulsar y organizar un paro general, unificando todas las luchas, contra los vetos y por la reafirmación en el senado de lo votado en diputados y que se conviertan en ley.

El miércoles 15 hs. te esperamos en el Congreso. La lucha continúa.