Escribe Cecilia García
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En el contexto de un paro contundente, el miércoles 14 por la mañana se llevó a cabo la caravana organizada por docentes y auxiliares autoconvocados de Almirante Brown. La caravana, con autos, bicis y gente a pie se inició a las puertas del Nacional de Adrogué y llegó a Jefatura Distrital y al Palacio Municipal. En jefatura regional fue recibida una delegación que entregó un petitorio con las más de mil firmas, mientras en la calle se hacía una hablada y se acompañaba con el canto: ¡suspensión y vacunación!
La actividad del miércoles estuvo precedida de una gran campaña de firmas de docentes, auxiliares y familias. El petitorio, que fue entregado a las autoridades, recolectó 1.098 firmas contra la presencialidad, por vacunación masiva, dispositivos y conectividad y que ningún trabajador de educación pierda continuidad laboral. Asimismo, el día lunes, ante los anuncios de paro de parte del Suteba Ensenada (con el cual se había votado solidarizarse) y la inacción de la conducción celeste, surgió la iniciativa de votar, a través del grupo de WhatsApp, el impulso del paro por parte del espacio de autoconvocados de Brown. La votación a favor del paro fue firme por parte de los docentes lo cual llevó a que los auxiliares se plegaran votando, el martes a la tarde, un paro distrital en la asamblea convocada por el sindicato ATE de Brown- Presidente Perón.
Se está poniendo en evidencia que los comités de autoconvocados han sido la herramienta que los docentes y auxiliares se han dado frente al inmovilismo de las direcciones sindicales ante el incremento de las muertes y contagios. Acciones como estas están emergiendo en toda la provincia de Buenos Aires. En la zona sur han surgido comités contra la presencialidad en Lanús, Lomas de Zamora, Echeverría- Ezeiza, Varela y Quilmes. Los comités impulsan, a través de grupos de WhatsApp petitorios contra la presencialidad, recorridas de escuelas y radios abiertas. Hay que avanzar en la coordinación de estos comités de base, así como en la concientización de la lucha, apuntando a pronunciamientos de escuela y a sumar a las familias a comités similares
Los anuncios en la noche del miércoles de la suspensión de clases presenciales por quince días en el AMBA, son un triunfo, limitado pero auspicioso, de la docencia que se organiza y lucha por la salud y la vida. Se trata del primer paso. Ahora vamos por el no inicio sin vacunas, dispositivo y conectividad para docentes y estudiantes, ningún docente ni auxiliar sin trabajo.