Tucumán: gran jornada de lucha por el salario y la reincorporación de Mario Domínguez

El miércoles 22, en distintos puntos de la provincia, la Coordinadora de Limoneros Autoconvocados de Tucumán realizó una nueva jornada de lucha por el salario y un conjunto de reclamos pendientes del periodo intercosecha. En esta oportunidad, en primer término se reclamó la reincorporación de Mario Domínguez, referente en la zona del Molino y Concepción, quien integra la mesa de dirección de la Coordinadora. El martes, en una forma no habitual, se apersonaron en su domicilio un abogado, un jerárquico y una secretaria para informarle que prescindían de sus servicios. Luego le llegó un telegrama donde le informaban que la indemnización estaba a su disposición. Por ese motivo, entre otros, la jornada de lucha en esta oportunidad, se realizó con cortes de rutas y bloqueos en las puertas de algunas citrícolas, entre ellas Citromax, responsable del despido de Domínguez. Allí, se produjeron discusiones e incidentes. El jefe de Relaciones Sociales, señaló que Citromax no tenía nada que ver con el despido, que la responsable es una empresa tercerizada, creada por Citromax.

Luego anunció que iba a realizar acciones penales contra cinco compañeros por obstruir el tránsito y posteriormente avanzó con su automóvil atropellando a dos compañeros.

Otra importante concentración se realizó frente a la citrícola Padilla, perteneciente al presidente de ACNOA, en la zona de San José.

Esta es la cuarta jornada de lucha, que fueron resueltas en importantes asambleas zonales a finales de febrero y principio de marzo.

Este proceso se desenvuelve en un cuadro de fractura de la burocracia que ha terminado con la creación de dos UATRE en la provincia. Una que está intervenida por la conducción nacional que es reconocida por el Ministerio de Trabajo y a cuya cabeza se encuentra Voytenco, quien intervino la seccional de Tucumán designando como interventor a Germán Ferrari, un burócrata alineado con Jaldo. La otra UATRE está en poder de “Remache” Ferreyra, un burócrata alineado con Manzur y que responde a otra fracción nacional de UATRE referenciada con Ansolini.

Ante esta fractura y las amenazas verbales de “Remache” Ferreyra, de que si no se extendía el intercosecha y se iniciaban las discusiones paritarias iba a tomar medidas de fuerza, y las acciones crecientes de la Coordinadora, Voytenco realizó una serie de anuncios: el primero, que se extendía por dos meses más el intercosecha y se lo elevaba de 24 a 32 mil pesos, una miseria, pero más serio aun cuando sostuvo que los beneficiarios iban a ser 20 mil obreros, cuando en la actividad en la temporada el propio gobierno sostuvo que los trabajadores citrícolas suman 50 mil. Días después Voytenco anunció que el aumento por revisión de octubre del año pasado iba a ser del 47 %, no retroactivo y que en la próxima semana comenzarían las discusiones paritarias.

Frente a todas estas medidas las patronales agrupadas en ACNOA no abrieron la boca. Hace un par de semana, Massa les anunció que todas las economías regionales y como plazo máximo el mes de abril, sus producciones de exportación, iban a recibir un tipo de cambio preferencial, que comenzaban con el “dólar Malbec” reclamado por los viñateros y bodegueros de Mendoza, pero que también va a beneficiar a Tucumán con el “dólar limón”. Con esa medida, los empresarios citrícolas, son beneficiados por un tipo de cambio especial, mientras a los trabajadores solo les llegan migajas.

Frente a todo este escenario, la Coordinadora ha decidido continuar con su plan de lucha reclamando un aumento del 140 % para las paritarias, y en paralelo una campaña por la reincorporación de Mario Domínguez que va a consistir en acciones de lucha, con movilizaciones, actos, cortes y bloqueos, en especial contra la patronal negrera de Citromax y sus tercerizadas, pero también procurando el apoyo solidarios de sectores combativos de la provincia, para transformar la defensa de los puestos de trabajo de los luchadores en una bandera obrera y popular.