Cierre de escuelas en CABA: Jorge Macri no da explicaciones a miles de familias de las escuelas públicas

Varias familias afectadas por los cierres de grados y escuelas nos acercamos a la reunión con vecinos que Jorge Macri realizó en el instituto de gestión privada Cabrini. La reunión transcurrió apaciblemente mientras se hacían reclamos vecinales como la caca de los perros en las veredas, el estado de los árboles paraíso, la convivencia de los vecinos con los hinchas y espectadores de fútbol en Argentinos Jrs. y otros reclamos, hasta que planteé el clima de incertidumbre y el maltrato que este gobierno tiene para con miles de niñas y niños y sus familias. Allí fue cuando Jorge Macri se puso de pie y ofuscado respondía en un tono más autoritario que cuando hablaba de la caca de los perros.

No escuchó razones, ni los semaforazos, ni los abrazos, ni las caminatas, ni las firmas, ni visitas a los distritos, nada aflojó su autoritario semblante: “estamos trabajando para que los chicos estudien mejor y punto”, dijo. Ante la sistemática falta de respuestas de todas sus oficinas sólo dijo “o será que a ustedes no les gustan nuestras respuestas”. Todo su discurso tuvo el objetivo de violentarnos. Cuando algunos vecinos oyentes escucharon que la política de ajuste y cierres estaba maltratando a miles de niños y niñas, Jorge Macri nos hizo notar que gozamos de un “privilegio”, pues tenemos una oficina para tratar estos temas directamente con el ministerio, pero no dio la orden a ninguno de sus funcionarios para que nos tomara el contacto y resolver el problema, como sí lo hizo con los vecinos que se quejaban por las “caras de los hinchas” que toman vino en las inmediaciones de la cancha, allí sí procedieron rápido.

El nerviosismo y el malhumor que envolvió a Jorge Macri sólo se explica por el hecho de que su política de ajuste es violenta e impiadosa con los menores, no tiene forma de defender semejante atropello, ni de explicarlo y mucho menos de justificarlo. Miente cuando dice que quedará el 20 % de escuelas de Jornada Simple, miente cuando dice que tiene las firmas de las familias que están a favor, porque si todo es mentira (cierre de grados y jornada simple) ¿de qué están a favor las familias? No lo explica.

Su forma violenta de fabricar un aplauso en contra de las familias denunciantes muestra su inhumana intransigencia, cuando -prejuzgando que éramos docentes- le recriminó a Elizabeth, una de las madres de la escuela Nº 16 cerrada por Jorge Macri: “Ustedes van a tener el problema de poner el dedito, ese es el verdadero problema”, refiriéndose a la biometría que quieren implementar en las escuelas. Y no solo no le contestó, también la señaló que la conocía de una reunión anterior tratando de demonizarla y justificar su censura.

En toda la reunión quedó demostrado que para esta gente la Educación Pública y sus comunidades valen menos que la caca de un perro.

No hay resoluciones, ni comunicación oficial, un ministerio completo manejándose en las sombras, manteniendo el registro de inscripciones online en un conveniente secretismo. Tampoco va a las Escuelas Públicas a realizar estas charlas. Si tanto bien provocaran estos cambios violentos, no tendría por qué esquivarnos. Y si viene a la Pública, le adelantamos que usaremos las mismas sillas de la Escuela, para que no gaste de más con el alquiler de 400 sillas completamente innecesarias como vimos que alquiló para la reunión que describimos.

Sin lugar para una explicación, ni escucha, sin una oficina que realmente atienda el reclamo de miles de familias, será necesaria la persistencia en la autoorganización por escuelas, distritos, barrios, comunas, diseñar todas las actividades en dirección a una acción común como una marcha al ministerio, agilizar todos los pasos legales pertinentes para asegurar los grados y jornadas simples allí donde la quieran cerrar. Organizarnos con los docentes para sumar fuerzas e iniciativas y defender la calidad educativa que se mantiene sólo si no se pierden cargos docentes, defender sus cargos es defender a la Educación Pública, y si el conjunto de la docencia y todos sus gremios tienen que debatir una huelga educativa en esta ciudad ante este atropello tenemos que formar parte de ese debate y organizar una huelga activa. Nada sirvió hasta aquí, desde que asumió Macri en 2007 sólo hubo ataques a las escuelas, es hora de decir BASTA.