Miércoles 17, desde las 15 hs., en Congreso. Concentramos en Rivadavia y Rodríguez Peña.
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Este miércoles la Cámara de Diputados tratará los vetos a las leyes de emergencia pediátrica y financiamiento universitario.
En la votación original, la emergencia pediátrica alcanzó los dos tercios en Diputados, mientras que la ley de financiamiento de las Universidades quedó a un voto. Las ausencias y abstenciones terminarán por inclinar la balanza. En estas horas, comenzaron a correr rumores de que los gobernadores podrían ´aflojar´ a cambio de fondos para sus provincias. No sería extraño, por lo tanto, que por un mínimo y calculado margen la insistencia en una o ambas normas finalmente fracase. Fue lo que ocurrió con la ley que otorgaba mejoras mínimas a los jubilados.
Por otro lado, Milei ratificó su política en la cadena nacional del lunes a la noche. Prometió ´un mundo mejor´, pero para 2026, incluso mayores partidas para educación, salud, discapacidad y jubilaciones. Nadie le cree. Es demasiado obvio que se trata de un intento por recuperar terreno luego de la deblacle electoral en la Provincia de Buenos Aires de hace 10 días.
Basta un ejemplo para desmentir al gobierno: el Presupuesto 2026 prevé la mitad de los fondos que solicitaron las Universidades –pidieron 7,32 billones de pesos, pero el proyecto estipula 4,8-. La UBA ya comenzó a ´autoajustarse´, restringiendo gastos operativos que abarcan desde el uso de calefacción o aires acondicionados hasta la restricción de programas de extensión universitaria o investigación. Los salarios de los profesores se derrumbaron más del 40 % desde que asumieron los liberticidas, y las becas se recortaron en un 80 %. En cambio, los que están de parabienes son los parásitos financieros: sólo en agosto, la deuda aumentó 7.000 millones de dólares, a pesar de haber pagado, en el mismo mes, el equivalente a ¡20.444 millones de dólares!
Es evidente que esta sangría impugna cualquier posibilidad de ´mejoría´ para los trabajadores. “Ratificar el rumbo”, como anunció un Milei de buenos modales el lunes a la noche, significa ratificar el programa del capital financiero, o sea, un padecimiento sin límite para el pueblo. Sin embargo, ningún gobernador señaló esto, porque ellos mismos colaboraron con la aprobación de la ley Bases y la vigencia del DNU 70/23; apoyan las ´reformas estructurales´ -laboral, previsional y tributaria- y los compromisos con el FMI y el pago de la deuda. Quieren Milei hasta 2027.
Ante el derrumbe del gobierno, han tendido su mano al ´diálogo´. Para el pueblo, en cambio, es el momento de ponerlo nocaut con una huelga general.
Impulsemos una movilización extraordinaria contra el veto. Ocupemos las facultades y ganemos las calles para arrancar el aumento inmediato de salarios y jubilaciones, con base en los dos millones de pesos de mínimo, y de presupuesto para las Universidades y el Garrahan, votado por sus trabajadores.
