Escribe Julio Gudiño
Abajo la causa trucha armada por la patronal de Casino Club S.A.
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El pasado 13 de septiembre la Policía de Misiones detuvo ilegalmente en su domicilio a Héctor Olivera, miembro del Cuerpo de Delegados del Casino Club de Misiones.
La casta judicial de Misiones metió con fórceps a Olivera en una causa abierta por “asociación ilícita”, que investiga la falsificación de documentación médica por el simple hecho de facilitar a un compañero de trabajo el teléfono de un psiquiatra en una actividad económica que, debido a las estresantes condiciones de trabajo, turnos rotativos y salarios miserables, las consultas médicas con profesionales de la salud mental es moneda corriente.
Todo este mamarracho político-judicial-policial tiene como principales animadores e instigadores a la patronal del Casino Club que quiere aniquilar moral y físicamente al Cuerpo de Delegados que integra Olivera, porque estuvo a la cabeza de un proceso de organización y movilización de sus trabajadores por paritarias libres, aumento de salarios y mejoras en las condiciones de trabajo. Este Cuerpo de Delegados movilizó en 2024 a todos los trabajadores del Casino Club de Garupá al Concejo Deliberante, para que adhiera y haga cumplir la Ley Antitabaco (26.687) que la patronal violaba para atraer más clientes y aumentar su facturación, sin considerar que envenenaba a trabajadores y clientes.
La dirección nacional de Aleara, ecabezada por Zeiss – Fassione, sacó un comunicado en el cual repudian “cualquier conducta espuria de esa naturaleza, sin atenuante. Sin perjuicio de ello confiamos en la inocencia del compañero Héctor y que su situación se esclarecerá ni bien preste declaración indagatoria y recupere su libertad”. O sea, la burocracia sindical no reclama la libertad de Olivera y el archivo de la causa trucha, sino que ´confía´ en que el Poder Judicial al servicio del Casino Club S. A. resolverá adecuadamente.
Reclamamos la libertad inmediata de Olivera, el archivo de la causa penal y la satisfacción de todos los reclamos pendientes de los trabajadores del juego de azar de Misiones.
