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El miércoles 22 los trabajadores municipales realizaron distintas actividades de protesta por incumplimiento del municipio en los acuerdos paritarios ya firmados.
Si bien cada sector tiene sus reclamos puntuales, hay uno que recorre a los 6.400 trabajadores municipales: el pase a planta permanente. Sin embargo, desde el sindicato de municipales se exige el pase a planta permanente de sólo 300 de ellos. Ramón Lanús utiliza la figura de “monotributista” para esconder la relación de dependencia, lo mismo que hacía su antecesor Posse.
Hay reclamos puntuales en sector de cultura, cementerio, campos de deportes etc.; sin embargo, no hay una lucha unificada. El sindicato de municipales (tristemente conocido en el distrito por entregar todos los reclamos y estar del lado de quien maneje el poder ejecutivo), dirigido por Omar Arc, se ha encargado de que cada sector luche por su cuenta. Por otro lado, el paro en el sector salud no tiene continuidad. En los tres hospitales municipales se realizó un paro, sostenido principalmente por las enfermeras, quienes reclaman el sistema conocido como SADOFE (sábados, domingos y feriados). Es un sistema de franqueros que no sobrecarga a las enfermeras por el día de descanso que les corresponde. También se reclama un bono de 300 mil pesos para octubre y una actualización del presentismo de 80 mil pesos. Por su parte, el sector de espacio público hace días que viene realizando un recorte de tareas (de 7 a 12 h) por el no pago de una suma fija de 120 mil pesos.
Las sumas fijas o bonos debieron cobrarse en julio, demostrando que el sindicato ha tenido que salir de su inercia por presión de las bases. El sindicato municipal no dará ninguna respuesta los trabajadores (en declaraciones radiales el secretario general reconoció que los trabajadores municipales son INDIGENTES, es decir cobran menos de 520 mil pesos); es necesario darle continuidad y profundidad a los métodos de lucha con un paro por tiempo indeterminado construido en asambleas conjuntas.
