Tiempo de lectura: 3 minutos
Lionel Messi acaba de recibir la llave de la ciudad de Miami de manos del alcalde Francis Suárez en el American Business Forum. Es el foro empresarial más importante de la ciudad; contó incluso con la presencia del presidente de Estados Unidos Donald Trump y de la venezolana María Corina Machado, quien se conectó de manera remota, según informo el “Miami New Times”. Mañana habrá de prestar sus servicios Javier Milei.
Muchas delegaciones de deportistas han recibido llaves de ciudades o reconocimientos de “ciudadanos ilustres”, pero es la primera vez que lo hace una entidad patronal.
Para los empresarios de Miami la contribución de Messi, cuando se integró al Inter Miami, fue enorme. Lo fue en términos económicos, reactivando la presencia del público americano en las canchas, así como el turismo y negocios de todo tipo. La presencia de Messi es funcional a la difusión del próximo campeonato mundial, que tendrá lugar en el triángulo de Estados Unidos, México y Canadá.
Messi, al recibir la distinción, señaló de algún modo que, en Miami, había encontrado la “llave de la felicidad”, incluida su familia.
Dijo también una verdad a medias al señalar que su permanencia en la práctica del futbol tenía fecha de caducidad y que le gustaría integrarse al mundo de los negocios. “El tema empresarial es algo que me interesa. Me gustaría seguir aprendiendo porque no sé nada y estoy arrancando en esto”.
Pero Messi no es un improvisado en el mundo de los negocios; alrededor de la explotación de su imagen ha pasado a ganar más dinero que con el mejor de los contratos laborales. Lo demuestra la interminable cantidad de empresas que dirige o co-dirige prácticamente en más de diez rubros comerciales. En lo inmobiliario y hotelería, cuenta con una cadena de hoteles en Barcelona, Ibiza, Mallorca, Andorra y Cádiz; en alimentación, con una cadena de 70 locales en Argentina, Uruguay y Estados Unidos, congregados en el llamado “Club de la Milanesa”, y en restaurantes en Rosario.
Además, lanzó en 2024 su propia bebida energética en EE.UU., la “Más +”, y una cadena de vinos (Messi Collection), con llegada a Europa y EE.UU. En el rubro de la vestimenta, creó The Messi Sport, ropa deportiva casual que cuenta con varias sucursales en Miami; en deportes electrónicos, tiene Kru Sport, en sociedad con el Kun Agüero, con presencia en Buenos Aires, México y España; y lo principal: la explotación de su propia imagen en publicidad de distintas marcas en todo el mundo. Demostrando que no es un improvisado en el negocio empresarial, tiene su propia Fundación, creada por su padre que, además de desarrollar ayudas en distintos lugares del mundo, también ayuda a “acomodar” los impuestos que se llevan algunos Estados de estos enormes beneficios.
La figura de Messi además de ser idolatrada por su juego por la mayoría de los hinchas de futbol del mundo, es una figura relevante para los capitalistas. Es la contra cara de los Maradona, de los Mike Tyson, de los cientos de deportistas que han dilapidado sus fortunas en la pérdida del equilibrio entre sus ingresos y su comportamiento social. Por el contrario, Messi es un “triunfador”, un modelo de hombre. En las palabras que hicieron hace muchos años a David Oman Mc Kay -presidente de la Iglesia de los Santos de los Últimos Días- Messi sería el prototipo de “un arquitecto de su propio destino”.
Nosotros no creemos que los hombres sean “arquitectos de su propio destino”. Nos quedamos con la vieja idea de Trotsky que desacreditaba que el individuo es el centro de su propio universo y que el triunfo de los hombres sólo podía ser colectivo.
Disfrutamos y disfrutaremos a Messi futbolista, cuyos logros deportivos siempre han sido colectivos. Entendemos esta “distinción” como parte interesada de un grupo de capitalistas.
Seguiremos luchando contra los negocios capitalistas, vengan de donde vinieren. Días pasados estuve en el restaurante de Messi que está a metros del Monumento de la Bandera. Hablando con el mozo me dijo que tienen el convenio gastronómico pelado, $ 800.730 mensuales. Así las cosas, el mundo y la pelota siguen rodando.
