Escribe Joaquín Antúnez
Grabois, Mayra Mendoza, Kicillof, todos divididos triunfaremos.
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En la mañana del lunes 22, el Concejo Deliberante de Quilmes abordó una ordenanza municipal que regula las fotomultas y convoca a una licitación pública para aplicar el sistema de estacionamiento medido en la vía pública. El municipio cobrará un cánon mensual en las zonas habilitadas, los cuadrantes del centro de Quilmes, Bernal y Quilmes Oeste.
La sesión desató una crisis en PJ de Quilmes. Más de 100 cuidacoches agrupados en el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), que dirige Juan Grabois, se movilizaron para denuncicar a Mayra Mendoza, intendenta licenciada del distrito, y a su sucesora, Eva Mieri de La Cámpora, por llevar adelante este proyecto “neoliberal”. La movilización del MTE fue duramente reprimida y dejó como saldo un herido y una militante detenida. La Policía bonaerense se encontraba apostada en el recinto. Kicillof se ha llamado a silencio frente a esta crisis.
El proyecto de ordenanza fue conocido de antemano por medio de una concejal que integra el Frente Patria Grande, Mariluz Mendoza. El proyecto fue aprobado por 17 de los 24 ediles. El oficialismo fue acompañado por los concejales del PRO, la UCR y uno de La Libertad Avanza. Lorena Aguirre del partido comunista revolucionaria y Gabriel Ibarra del Movimiento Evita acompañaron el proyecto. Habían acordado con el oficialismo la contratación de cuidacoches como empleados de la empresa que resulte ganadora de la licitación.
Toda la atención mediática estuvo puesta en el cruce entre Grabois y Mayra Mendoza. En un audio filtrado a la prensa, Mendoza le dice a Grabois “quién carajo te crees que sos”. Lo acusa directamente de querer “psicopatear” y llevarse una tajada económica. Según declararon otros funcionarios quilmeños, Grabois se opone a la licitación porque había reclamado que le dieran el sistema de estacionamiento medido directamente a una cooperativa del propio MTE. Por el lado de Grabois, acusan que el Ejecutivo quilmeño ha puesto más de 110 puestos de trabajo en peligro - en referencia al padrón de cuidacoches del MTE. Los cuidacoches -un oficio por demás precario- fueron institucionalizados mediante la estatización de las agrupaciones sociales, con la delantera del MTE. Ahora, la privatización y el llamado a licitación del espacio público apunta a la creación de “trabajo registrado” - esgrime Mendoza. El MTE discute que la ordenanza dejaría a muchas familias sin su principal ingreso. Según los medios locales, la licitación está armada a medida de un empresario vinculado a la intendenta, Leandro Camani, dueño de la empresa Secutrans, que se especializa en las fotos multas.
Los medios han presentado el choque como una disputa por intereses económicos, asociados a la suma millonaria que manejan los cuidacoches sin que el municipio haga usufructo de los mismos. El objetivo del Ejecutivo quilmeño sería instalar del modelo “exitoso” de Berazategui. La Provincia también recibe su parte con la habilitación formal de las fotomultas, cuyas cámaras fueron colocadas en las principales avenidas pero no podían ser utilizadas sin la ordenanza correspondiente.,
Grabois es rechazado por los intendentes. En una mirada más amplía, el PJ bonaerense se encuentra enfrascado en una batalla interna por la sucesión de Máximo Kirchner como presidente del partido.
El dirigente del MTE parece decidido a una confrontación; ha montado una movilización similar en Lanús, donde gobierna Julián Álvarez, otro camporista que ha hecho migas con Mendoza contra Axel Kicillof.
Que la tapa de los diarios, previo a la Navidad, muestre al PJ protagonizando una interna de este tipo escenifica el nivel de lejanía que mantiene con las necesidades de los trabajadores. Los cuidacoches, enviados por Grabois, no han recibido en dos décadas de gobiernos “nacional y popular” más que un balde y una esponja. La “economía popular” ha sido el discurso progresista para la precarización laboral y la ausencia completa de un plan de empleo masivo de la población desocupada.
