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"No voy a parar hasta que estén presos todos los responsables. Le dije al presidente y al gobernador que dejen de prometer y hagan. Quiero a todos los responsables presos". Las palabras de Cristina Castro, madre de Facundo Astudillo, hicieron vibrar a las columnas reunidas en la Sexta Marcha Nacional contra el Gatillo Fácil, organizada por familiares de víctimas de las fuerzas de seguridad, y a las del Encuentro Memoria Verdad y Justicia, que coincidieron este jueves en la Plaza de Mayo. Participaron referentes y organizaciones políticas y de derechos humanos.
Cristina se había reunido con Alberto Fernández en la semana. No dudó en hacerse presente para denunciar la complicidad del ministro de Seguridad Sergio Berni con los asesinos y exigir su inmediata renuncia: "No por Facundo nada más sino por todos los pibes que están matando y para que no haya más muertes. Ser joven y libre es un derecho", dijo ante una plaza que la abrazaba con aplausos y al grito de “Fuera Berni fuera”.
La numerosa columna de la Tendencia del Partido Obrero y del Polo Obrero entró a la Plaza por Diagonal Norte, cantando “ahora, ahora, resulta indispensable, que aparezca Facundo y castigo a los culpables”. Cristina se acercó, agarró el megáfono y expresó su agradecimiento a la militancia que estaba movilizándose. Fue un momento emotivo. Las compañeras del Polo se acercaron a saludarla.
Desde las 14, la plaza recibió los testimonios y denuncias de numerosos familiares de víctimas de la violencia policial y el ´gatillo fácil´. Los testimonios, desgarradores, describieron un cuadro de barbarie a manos de las fuerzas policiales, especialmente en las barriadas obreras. El ´gatillo fácil´ es una práctica cotidiana de una policía que se arroga el derecho a dictar pena de muerte y cuenta con cobertura política y judicial.
El Encuentro Memoria Verdad y Justicia entregó un petitorio en la Casa Rosada y realizó un acto en el que se leyó el pronunciamiento acordado por las organizaciones firmantes. Cristina fue la encargada de cerrar el acto: “Cuando dijimos nunca más lo dijimos en serio”.
Del acto participaron también las trabajadoras del Sanatorio Plaza que están tomando el edificio contra los despidos.
Nos retiramos marchando por Avenida de Mayo. El Estado es responsable, el gobierno encubridor.
