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Después de varios meses de movilizaciones, cortes, ollas populares, el último viernes 21 de agosto, los trabajadores de la cultura, agrupados en varios colectivos, volvimos a cortar la calle frente al municipio de Rosario. Artesanos, artistas callejeros, músicos, sonidistas, denunciaron desde el escenario que el municipio no cumplió ninguna de sus promesas.
Siguen pendientes tanto el subsidio como la tarjeta de alimentos, la designación de lugares donde realizar actividades culturales con protocolos y el cese de la represión de la GUM.
El viernes, los funcionarios volvieron a recibir a los trabajadores de la cultura y a renovar las promesas incumplidas. Está claro que para que se cumplan los compromisos habrá que seguir movilizados y organizados.
El gobierno se comprometió a armar una reunión de los artistas con la Guardia Urbana Municipal para que cese la represión. También a gestionar la tarjeta alimentaria y a otorgar 1.000 pesos por mes a los trabajadores. Y sobre el pedido por el refuerzo de alimentos semanal y el reclamo de alimentos frescos (carnes, verduras, leche) y también sobre la rotación de los productos de la caja.
Los trabajadores de la cultura estamos cansados de tantas vueltas. Si no se cumplen los compromisos de manera urgente se reforzarán cortes y movilizaciones. Es necesario coordinar esta lucha con la de otros sectores de precarizados en lucha de la ciudad de Rosario: gastronómicos, telemarketers, cadetes. Unificar los reclamos en un gran movimiento de precarizados es la gran llave para arrancar las reivindicaciones de todos los sectores.
Desde la Tendencia del Partido Obrero y el Frente de Artistas participamos y brindamos todo nuestro apoyo a esta lucha.
