1° de Octubre: Enfermería somos todos

La violenta represión sufrida por una parte de las trabajadoras y trabajadores de Enfermería en la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, al término de la movilización este último 21S, ha trascendido a través de los medios en todo el país. El repudio se ha hecho sentir entre los trabajadores y algunas asociaciones de enfermería, como ALE y SITRE, han propuesto un paro con movilización para el jueves 1 de octubre. ATE nacional, en medio de su paritaria, ha anunciado una tímida “jornada de protesta”.

A pesar del enorme desgaste físico y estrés, la intervención política del personal de salud este 21S ha logrado colocar la agenda de reclamos del sector y de enfermería en particular en el centro de la crisis. La posterior represión en puertas de la legislatura porteña por parte del gobierno de Larreta puso de relieve la hostilidad y violencia de clase con la que los gobiernos provinciales, nacional y porteño atienden la situación del personal de salud.

El personal de enfermería de CABA como el de tantas provincias reclama el pase a profesional (ley 6.035) de su carrera, hoy inscripta dentro de la reglamentación del personal administrativo. En concreto reclaman una transformación estructural de las condiciones de trabajo. Una jornada de trabajo de 6 horas -30 horas semanales- que permita la creación de un nuevo turno y la urgente incorporación de personal, insumos y equipamiento. El colapso sanitario se ha expandido a todo el país y es dramático en Santa Fe y Jujuy.

La desesperante situación salarial con básicos desde 4.000 pesos ha sido uno de los reclamos fundamentales de la jornada del 21S y ha abierto una dura lucha del personal de salud en Misiones que requiere de una amplia solidaridad de todos. El gobierno provincial de Chubut adeuda a los trabajadores de la salud sueldos de agosto, aguinaldo, recategorizaciones y retroactivos. En distintos puntos de la provincia se desarrollan movilizaciones y cortes de rutas. El 21S llevó el reclamo de un salario básico de 70 mil pesos y ha logrado perforar los cerrojos de la negociación paritaria del sector públicos. La dirección de ATE ha tenido que rechazar la oferta de 15% en cuatro cuotas y algunos sectores plantean el paro para este 1O también.

Con situaciones críticas de contagios y fallecidos en todo el país, las acciones del 21S pusieron de relieve una gran reserva de fuerzas de lucha de los trabajadores. La jornada del 1 de Octubre está en la agenda próxima de los trabajadores de la salud y del personal de enfermería en particular.

Es necesario impulsar asambleas para organizar la jornada contra la represión a las compañeras y compañeros.

Por el urgente aumento de salario para el personal de salud público y privado y por el conjunto de reclamos que a lo largo y ancho del país que le da forma al movimiento de lucha de la salud. Por la defensa de la salud pública. Por una coordinadora nacional de lucha de salud y un congreso que discuta una transformación estructural de la salud en el país para afrontar la pandemia.