Subte: la jubilación y los retiros voluntarios de Metrovías

Escribe Matías Cisneros

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El acuerdo UTA-Metrovías que declara no remunerativo el 40% del salario durante cinco meses golpea el cálculo de jubilación inicial. Quien esté en edad de jubilarse, o cercanos a ella, pierde de 3 a 4% de su primer haber. El decreto del gobierno nacional habilitando el pago del 100% del salario en carácter no remunerativo a los mayores de 60 años licenciados, duplica esta presión mes a mes. En los dos meses que restan del año, la pérdida como resultado de estas dos medidas será un recorte del 10% de jubilación inicial. Para Metrovías, en cambio, significa un ahorro de entre 420 y 680 millones de pesos, dependiendo de la resolución de la paritaria – ésta ya lleva nueve meses vencida. Una transferencia de recursos al grupo Roggio que tiene negocios desde Argentina hasta Panamá en empresas tecnológicas, hoteles, casinos, lotería, residuos, obra pública, insumos mineros y petroleros y, por supuesto, transporte.

La insalubridad en el subte es cada vez más mayor. Al trabajo en los túneles, se han sumado el asbesto y el coronavirus. Metrovías se ha beneficiado con el desconocimiento de la declaración de insalubridad los trabajadores han inscripto la jornada de 6 horas en su convenio colectivo, pero no lograron el reconocimiento de su trabajo como tarea insalubre. La jornada de trabajo a 6 horas no significa que desaparece la insalubridad, por eso es tan importante la jubilación a los 55 años y el 82% móvil del salario del trabajador activo.

Ante esta situación, la directiva del sindicato formó un cuerpo de abogados para asesorar a los trabajadores y mejorar las posibilidades de acuerdo. La negociación se encuentra condicionada por el acuerdo de la UTA con la patronal y el decreto del gobierno nacional. Además, necesitamos tener en cuenta el ingreso de personal que cubra el puesto de quienes se jubilan, otra razón para encararlo de forma colectiva. Es necesaria la deliberación en los sectores de trabajo.

La organización de una asamblea general de quienes se encuentran licenciados ayuda a desarrollar una respuesta de conjunto a esta presión patronal. La defensa de los aportes a las cajas de la Anses y Pami es fundamental para la defensa del salario jubilatorio, en perspectiva de 82% móvil a los 55 años por insalubridad. Un congreso de bases de los trabajadores activos y pasivos en defensa de la jubilación, puede ser la herramienta para defendernos de la Reforma Previsional en danza. El llamado a la deliberación necesita incluir una acción de lucha a 3 años de la batalla contra el Estado en las puertas del congreso este próximo 14 y 18 de diciembre.

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