Escribe Carlos Frígoli
En defensa de Fede Decoppet y la Tendencia.
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La repentina muerte de la personalidad mas descollante de la izquierda en Vicente López ha conmovido a muchos sectores del pueblo. Nos han llegado doloridas notas, saludos y muestras de afecto y respeto de personalidades y organizaciones políticas y sindicales. Con diferencias, a veces abismales, todo el mundo reconoce el valor de nuestro compañero, su rol en las luchas, su claridad conceptual. En la lucha contra las inundaciones, en la toma de Panificación 5, en la pelea de Barrio Mitre, y tantas otras. Fede fue destacado vocero de muchas de ellas, y el periodismo, con anuencia de los participantes, se dirigía a él para explicar los problemas que cada pelea implicaba. Adjuntaremos algunas de las salutaciones que nos han llegado.
Lo que indigna, realmente, ha sido la hipocresía de los que expulsaron a Fede del Partido Obrero. Solano, Pitrola, y otros que hoy saludan "su lucha obrera y socialista" son los que lo calumniaron, lo vituperaron, lo suspendieron, y finalmente lo expulsaron junto a 1.200 militantes de la organizacion por su colaboracion en la formacion de la Tendencia, en defensa del programa historico del PO, de la democracia interna y del derecho a defender sus ideas dentro de la organización como tendencia, o incluso fraccion, como estaba consagrado en los estatutos de Politica Obrera y del Partido.
Los que atacaron e intervinieron el Comité de Vicente López, que acusaron a Decoppet y a otros de defender a golpeadores y abusadores de mujeres, de "facciosos" y alguno le espetó "fascista" a un constructor que, con tenacidad, bregaba por una idea. Federico y otros compañeros fueron sancionados, suspendidos, intervenido un comité que él integraba, que objetaba la linea democratizante y los métodos prepotentes de "dirigentes" que no le llegaban al tobillo. No vacilaban en una accion liquidacionista de la militancia, para quebrar la base de apoyo a esa legítima disidencia. Así, intervenian "por arriba", enviaban a "comision de control" a los disidentes, rentaban compañeros con la condicion de que se pasaran a sus posiciones, pero perdían sistemáticamente los plenarios de militantes a pesar de la accion confusionista. A veces mandaban a medio comité ejecutivo (Solano, Heller, Bravetti, Donald) para ver si doblegaban a la militancia, imponían otros delegados congresales, y salían derrotados igual.
En un articulo de Prensa Obrera, firmado por Matías Tomasello, despues de hacer un panegirico de Decoppet, dice textualmente: "despues de diez años... nos alejó en la última etapa su ruptura con el Partido Obrero junto al grupo de Altamira para construir otra organización con otras posiciones políticas", para encubrir a los expulsadores de medio partido, a los que se negaron a luchar contra Macri en pleno colapso de su politica en 2018, a los que votaron leyes prosionistas como Solano (y Bregman), a los que le dan quórum a Capitanich en el Chaco para la apropiacion privada de tierras, a los que en vez de apelar al debate con la militancia, expropian, de manos de la justicia burguesa a la totalidad de los militantes del Partido Obrero de Jujuy de la personeria que ellos lograron con su accion y el nombre del partido que construyeron. Hoy el FITU de jujuy es el PTS y el interventor aprobado por el juez, y no la militancia. Y lo mismo en otras provincias. Por otro lado, Federico Decoppet, que luchó simpre contra los lobbis inmobiliarios, ¿hubiera apoyado un negociado de Tinelli, como hizo el legislador del FIT? A Tomasello le recuerdo que Judas, despues de acompañarlo años, vendió a Cristo por treinta monedas.
La defensa de Federico Decoppet en el campo de la clase obrera y el socialismo esta asociado a la democracia partidaria, al control de la militancia sobre los parlamentarios socialistas, sometidos a las presiones de ese conglomerado de lobbis procapitalistas, al derecho a batallar en un partido obrero por las propias ideas, incluso formando tendencias o fracciones. una discusión que puede perfectamente hacerse en estas condiciones en forma publica y abierta. lo que nunca vale es la censura, la presion y la calumnia.
La lucha por un partido de la clase obrera enfrento siempre, y enfrentará, escollos de todo tipo, incluso la descomposicion de dirigentes bajo el influjo del llamado "sentido común", claro, burgués. Serán las masa, rebeladas contra las espantosas condiciones de explotacion, miseria y muerte a las que le capital nos condenan, que ayudaran, si acertamos en la orientacion, a disolver esos escollos. Porque los anunciadoores de "planchazos" de las masas e "iniciativas estrategicas" del imperialismo se rompieron la nariz contra el escenario actual.