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En la última semana, la campaña de afiliaciones en la Ciudad de Buenos Aires acusó el impacto de los videos -que fueron masivamente distribuidos- y otras iniciativas pidiendo la afiliación para alcanzar la legalidad de la Tendencia, aun en las complejas condiciones que impone la restricción a la circulación.
Casi un centenar de personas subieron sus datos a la página o nos escribieron para que nos acercáramos con las fichas a su casa. Algunos, viejas relaciones del partido, otras son personas que registran a la Tendencia del Partido Obrero y se interesaron por las posiciones que oyeron en los videos o en algún programa de televisión. El ´boca en boca´, la colaboración de nuestros simpatizantes con la militancia de la Tendencia para atraer a nuevos compañeros se hizo sentir.
La carta pidiendo que quienes ya se afiliaron busquen apoyo a la legalidad de la Tendencia también fue efectiva, una idea que surgió de los contactos que, por la propia, pidieron fichas para afiliar a sus compañeros de trabajo, su familia, sus amigos. Hemos establecido una intensa recorrida de padrón para ir a visitar a todos aquellos que dispuestos a colaborar con la campaña.
Esto no ha significado, de todos modos, abandonar la calle. Durante el fin de semana, superado el aguacero de los primeros días, estuvimos presentes en los principales parques de la Ciudad -Parque Centenario, Lezama, Los Andes, Saavedra, Rivadavia, entre otros- y se desarrollaron actividades en las villas 1-11-14, 21-24 y 15, con un saldo de más de un centenar de afiliaciones en una jornada.
En muchos casos, a pesar del frío, mucha gente se paró a preguntar “¿Ustedes cómo la ven?”. El Partido Obrero tiene un lugar ganado en la memoria colectiva, por sus luchas y posiciones políticas. La apelación a colaborar con el derecho democrático de quienes defendemos su programa histórico a participar de las elecciones surte efecto.
“Claro, cómo no me voy a afiliar. Yo a ustedes los conozco desde la época de Cromañón, de las marchas por los pibes”, nos dice un pibe -que ya no es tan pibe- mientras extiende la mano a la birome y firma su ficha.
Mientras preparan el guiso del 25, las compañeras de Polo completan prolijamente las fichas de afiliación: son bolivianas, paraguayas, peruanas que quieren que los trabajadores construyamos nuestra propia alternativa política. Las compañeras del Bajo Flores aprovechan el fin de semana largo para ir a timbrear, casa por casa, para buscar afiliaciones entre los vecinos argentinos de la villa.
Estamos en la recta final de la campaña. Cada una, cada uno, suma su granito de arena. Adelante compañeros. El futuro es nuestro.