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La asamblea de trabajadores residentes y concurrentes de CABA ha convocado para este martes 26 a una concentración en el hospital Ameghino, a las 11 hs, y una posterior asamblea general, abierta y virtual, a las 19. El objetivo es organizar una respuesta frente al cierre de concurrencias en hospitales públicos.
El gobierno de Larreta y del ministro de Salud, Fernán Quirós, anunció el cierre de las concurrencias profesionales en los centros de salud público de CABA a partir del 2022. Estás prácticas de formación profesional para graduados de distintas disciplinas de la universidad sostienen, junto a residentes, áreas enteras de servicio frente al continuo vaciamiento de recursos y personal que sufren los hospitales públicos.
Desde el 2019 se han recortado un 70% de los puestos de concurrencias, acabando con áreas específicas médicas y sobrecargando aún más de tareas al ya agobiado personal de salud. En estas condiciones los trabajadores tuvieron que afrontar la crisis de la pandemia.
Residentes y concurrentes se vienen movilizando contra el desfinanciamiento de los centros públicos de salud y por los sueldos por debajo de la canasta de pobreza, la falta de derechos y el reconocimiento como trabajadores de la salud de los concurrentes, quienes no perciben salario ni cobertura ART.
El actual sistema de concurrencias sería reemplazado por un sistema de posgrados pagos. Los egresados que antes podían cursar y transitar las capacitaciones de manera gratuita en el ámbito público, ahora tendrán que pagar posgrados arancelados, un negoción que vienen cocinando las camarillas universitarias, quienes embolsan a través de los mismos el triple de lo que reciben del presupuesto estatal.
El plan para transformar a los concurrentes en pasantes es un intento también de ponerle fin a la lucha por su reconocimiento como trabajadores de la salud. Esta política privatizadora está en consonancia con las "pasantías de capacitación laboral" en secundarios y las PSE (prácticas sociales educativas) instauradas en la UBA, que no son otra cosa que trabajo gratuito por parte de estudiantes.
Pero esto no es todo. El acceso a las prácticas quedaría bajo la elección a dedo de las autoridades de cada unidad académica, a diferencia de los concursos públicos a través de los cuales se accede a la capacitación en el sistema de salud.
Actualmente, más de la mitad de los cargos concurrentes que resistieron los recortes pertenecen a psicólogos y profesionales de la salud mental, como musicoterapistas y psicopedagogos. Los centros de estudiantes universitarios conducidos por los radicales y agrupaciones de las camarillas, como ocurre en la Facultad de Psicología, se han llamado a silencio, siguiendo la línea de desmovilización propugnada por las autoridades de la facultad.
La defensa de las concurrencias, por parte de estudiantes y docentes en conjunto con los residentes y concurrentes de la salud es fundamental para torcerle el brazo a los que quieren hacer de la salud pública un negociado.
