Gran paro de los profesionales de la salud de CABA

Escriben Maxi S. Cortés y Lucía Guevara

Apropiémonos del destino de la paritaria.

Tiempo de lectura: 4 minutos

La Asociación de Médicos Municipales (AMM) y la Federación de Profesionales (FP) junto al conjunto de los trabajadores han llevado adelante un paro de 24 hs en los hospitales públicos y centros de salud de CABA con un alto nivel de acatamiento. Hubo movilizaciones del personal de enfermería, como así de residentes y concurrentes, quienes votaron un pliego propio y un nuevo paro para el próximo 29 de marzo.

La fuerza del paro contrastó con el cese de actividades de dos horas resuelto la semana pasada, prácticamente sin acatamiento. Estas medidas fueron resueltas a espaldas de los trabajadores, siguiendo la lógica de la negociación paritaria a puertas cerradas entre la conducción de Jorge Gilardi de la AMM y el gobierno de Larreta, en las que se define el salario de miles y miles de profesionales de la salud.

Este manejo clandestino de la paritaria está al servicio de su utilización frente a las próximas elecciones de la AMM, convocadas para el 7 de abril. La reacción de la oposición a Gilardi que dirigen Carlos Rojo y Ricardo Solari fue enteramente negativa, ya que su crítica a las medidas no iba acompañada por una convocatoria a asambleas en los hospitales para votar un pliego paritario y un plan de acción alternativos a los de la conducción del sindicato.

Rojo-Solari, ex laderos de Gilardi, juegan al desgaste del actual oficialismo. Su política podría sintetizarse así: “que Gilardi pierda la paritaria, así nosotros ganamos el sindicato”, a semejanza de lo que acaba de ocurrir en la UOM, donde Caló perdió las elecciones luego de firmar una paritaria del 45%, por detrás de la inflación. En lugar de servir a desarrollar los intereses de los trabajadores, los médicos seríamos víctimas de nuestra propia elección sindical.

La alianza opositora reúne a viejos burócratas ligados al pejota-kirchnerismo y a la Franja Morada, corresponsables del deterioro del salario y de la carrera profesional. Por su parte la nueva conducción de la Federación de Profesionales, integrada por el kirchnerismo y sectores de izquierda como el MST, actúa en la paritaria como segundo violín de la AMM. Todo esto resalta la necesidad de una intervención independiente de los trabajadores en la paritaria.

Impasse oficial y autoconvocatorias

El paro se ha sentido porque el descontento entre los trabajadores es proporcional a su compromiso de trabajo durante toda la pandemia y a la destrucción acelerada de su poder adquisitivo durante el mismo período. Pero por sobre todas las cosas, el paro, inconsulto y sin asambleas ni organización, puso sobre la mesa la tensión de una negociación paritaria que ha entrado en un impasse absoluto.

La conducción de AMM no puede firmar el mismo 40% en cuotas que aceptó la burocracia de Sutecba -también socia del Frente de Todos- el mes pasado con Larreta. La inflación anual se disparó con el aumento de combustibles y con los tarifazos que vienen en los servicios públicos, para reducir el déficit fiscal como pide el acuerdo del gobierno nacional con el FMI. Las sanciones económicas de la OTAN y el FMI a Rusia dispararon los precios del gas y el trigo a nivel internacional de forma exponencial.

El enorme malestar que recorre a los trabajadores es lo que explica la adhesión al paro de la salud a últimas horas de ATE Capital, que hace un mes no dijo ni “mu” de la entregada de Sutecba ni de los miles de despidos de los trabajadores contratados durante la pandemia. La burocracia médica de AMM, con una elección en puerta, tiene una paritaria en las manos que es una bomba política.

En este cuadro, la nota distintiva la puso la asamblea de residentes y concurrentes, que se concentró en las puertas del Ministerio de Salud y resolvió un pliego paritario propio: salario mínimo igual al costo de la canasta familiar (200 mil pesos), indexación mensual por inflación, el rechazo a la manipulación de los contratos de residentes frente a los rumores de acortarlos al 31/8 y la defensa de todos los puestos de concurrencia junto a sus derechos laborales. A su vez, se votó darle continuidad a las medidas con un nuevo paro con movilización al Ministerio de Salud de la calle Bolívar para el próximo martes 29/3.

Por su parte el activismo de enfermería se movilizó de forma independiente al Obelisco y Jefatura de Gobierno para denunciar la paritaria que firmó Sutecba, reclamando la reincorporación de los trabajadores contratados despedidos, contra la violencia institucional del régimen de trabajo y por el pase a la carrera profesional. Está planteado el reclamo por el rechazo y la reapertura de la paritaria de los municipales para quebrar la entrega de Sutecba y unificar en un convenio único a todos los trabajadores de la salud.

Tribuna de Salud Tendencia se propone desenvolver una gran agitación en hospitales y centros de salud para avanzar en la organización de la lucha general, preparando las próximas medidas de fuerza con asambleas que le disputen el destino de la paritaria a la burocracia y resuelvan una ruta de acción independiente.

Se plantea una lucha para conquistar un mínimo igual a la canasta familiar, la indexación mensual y para que los aumentos vayan al básico en una sola cuota, sin cifras en negro, incluyendo el blanqueo de todos los ítems y su carácter remunerativo. Para que todo el haber percibido compute para el aguinaldo y que las jubilaciones se abonen al 82% móvil. Para que se termine el descuento por el impuesto a las ganancias. Por el ingreso pleno a carrera profesional de residentes, concurrentes, suplentes de guardia, enfermería y todos los trabajadores precarizados.

Mientras la burocracia sindical y el gobierno se hunden en la disputa por el aparato sindical, está planteado desarrollar una poderosa acción independiente de los trabajadores de la salud, para derrotar al gobierno porteño e imponer en la paritaria la defensa del salario y de las condiciones de trabajo, que no son otra cosa que el derecho al acceso a la salud pública para toda la población.

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