Escribe Julio Gudiño
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Los trabajadores de la Clínica Provincial de Merlo cumplen su quinto día de paro en reclamo del pago de salarios adeudados (octubre y noviembre), en rechazo al pago de salarios en cuotas y por el cumplimiento de los aumentos salariales acordados en paritarias. La huelga es activa y se renueva diariamente en asamblea. Ayer, los trabajadores cortaron por dos horas la Av. Cámpora y hoy se hicieron piquetes de persuasión invitando a todos los compañeros a sumarse a la permanencia en la puerta de la empresa y también se informaba a los pacientes los motivos de la lucha.
El martes 5 la patronal hizo circular entre los trabajadores una "Carta Abierta" dirigida a IOMA con el claro objetivo de dividir al colectivo obrero y quebrar la huelga en curso. En dicha carta la patronal reclama el pago de la facturación de septiembre y hace responsable a Kicillof y Homero Giles de la "crítica situación financiera por la que atraviesa la Clínica", de las deudas salariales, del pago de los salarios en cuotas y de la imposibilidad de cumplir con los “compromisos paritarios”. Lo que no dice la patronal es que ya está en marcha la “desregulación” de las tarifas que cobran a los afiliados de las obras sociales porque desde hace mucho tiempo se impusieron copagos obligatorios que oscilan entre el 20% y el 25% del valor total de la prestación médica. En síntesis: la patronal se presenta como una “víctima” de la situación y no como la responsable directa de los atrasos salariales, de la violación de la legislación laboral y del convenio colectivo de trabajo y de la escalada de los precios.
Un punto importante de la "Carta Abierta" es que la patronal reconoce un secreto a voces: la firma de un convenio de exclusividad entre IOMA y la Clínica que, naturalmente, incrementó la facturación y la ganancia empresaria. Esto es reconocido por la patronal cuando afirma que “la Clínica Privada Provincial de Merlo ha celebrado con ustedes un contrato directo de prestaciones desde marzo del corriente año. Esta situación fue motivo de estímulo luego de tiempos muy difíciles atravesados por la pandemia y por condiciones de incertidumbre económica”. Este apetecible “contrato directo” que fue motivo de celebración por parte de la patronal no derramó hacia los trabajadores que desde hace dos años vienen soportando, en un marco de creciente inflación, el cobro de los salarios en cómodas cuotas ante la mirada cómplice de la dirección burocrática de ATSA seccional oeste.
La lucha por la defensa de los salarios y el convenio está atravesada por una lucha más de fondo en el campo de la patronal y en la presión que ejerce para exigir una desregulación total en materia de tarifas para incrementar súbitamente la tasa de ganancia del sector. Esto pondría al sistema de salud sostenido por las obras sociales sindicales ante una crisis financiera enorme o el recorte drástico de prestaciones médicas para los afiliados.
La situación de la Clínica Provincial no es un hecho aislado. La página de Facebook de ATSA seccional oeste nos ilustra acerca de los crecientes conflictos en el gremio en torno al rechazo del pago de salarios en cuotas y desconocimiento del convenio de trabajo. El mes pasado, por ejemplo, los trabajadores del Sanatorio San Justo pararon y cortaron Juan Manuel de Rosas. En octubre, los trabajadores de la Casa Hospital San Juan de Dios se declararon en asamblea permanente contra despidos arbitrarios y en defensa del convenio colectivo de trabajo. Y la lista sigue: Sanatorio Sarmiento, Clínica Constituyentes, Sanatorio San José Obrero, Sanatorio AMTA, Clínica Santa Rita, Sanatorio Bernal, etc. Ante este ataque de conjunto de las patronales contra el salario y el convenio, la burocracia de FATSA y ATSA (Daer), responden dividiendo la fuerza de los trabajadores con el clásico “estado de alerta y movilización” cuyo único objetivo es impedir que se pongan de pie asambleas de base para deliberar y votar un paro nacional de advertencia en el camino de la huelga general.
En el marco del golpe de Estado económico que prepara el gobierno de Milei, con los restos de JxC y sectores del peronismo, estas luchas obreras son importantísimas porque templan y preparan a masas de trabajadores y activistas para enfrentar los ajustes a la salud, las privatizaciones, despidos y reformas laborales que promete Milei-Macri y el FMI.
Ante la posibilidad de nuevas pandemias y crisis sanitarias llamamos a todo el pueblo de Merlo y a todas las organizaciones obreras, sindicatos, comisiones internas y activistas a apoyar y acompañar esta lucha de los trabajadores de la salud privada. Su triunfo será un triunfo de toda la clase obrera y el pueblo.