24 de Marzo: la marcha "unitaria" del FITU con el kirchnerismo

Escribe Marcelo Ramal

La implosión de “Memoria, Verdad y Justicia”.

24 de Marzo: la marcha "unitaria" del FITU con el kirchnerismo

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La jornada del 24 de Marzo tendrá características peculiares. Por un lado, una extraordinaria concurrencia de manifestantes se volcará a las calles a repudiar al gobierno liberticida de Milei, a la represora Bullrich, al nuevo acuerdo con el FMI y a apoyar a los jubilados. La Jornada está precedida por las combativas jornadas de lucha de los miércoles; por la marcha antifascista del 1F y por la jornada del Día Internacional de la Mujer Trabajadora; y más atrás, por las movilizaciones y ocupaciones de Facultades por la juventud y la docencia universitaria.

En oposición a ese derrotero, el palco y la “organización” del 24M ha sido monopolizado por quienes no sólo no aportaron un gramo a la lucha contra Milei, sino que colaboran con él desde el Congreso, los sillones de los sindicatos, las gobernaciones y las intendencias Nos referimos al pejota-kirchnerismo, que consiguió en este 24 de marzo lo que no había logrado en sus quince años de gobierno: monopolizar la jornada central.

El rol del FITU

En 2025, se ha ido hasta el final: el acto central y único del 24 ha quedado en manos de la burocracia de la CGT, Kicillof y la Cámpora. Desde hace un mes y medio, las organizaciones del FITU habían colocado como eje de este 24 la concreción de un “acto único” con el kirchnerismo, a través de un acuerdo político con sus organizaciones. Con ese fin, se concretaron diferentes reuniones con los K, con vistas a redactar un “documento” común, o sea, a establecer un frente político. Una marcha “unitaria” representa la unificación de propósitos del FITU con el kirchnerismo. La “unidad en la lucha”, sin confundir objetivos ni banderas, fue dejada de lado por la “unidad programática” en un acto en común. A nadie escapaba que semejante frente político representaba marchar con los responsables del arribo de Milei al gobierno y de la continuidad de los acuerdos con el FMI. Sin perjuicio del rol estatal del pejotismo K y del carácter patronal y antiobrero de sus funcionarios y de la burocracia de los sindicatos, los partidos del FITU renunciaron, incluso incondicionalmente (o sea sin dejar lugar a otra alternativa), a organizar una columna política independiente, con un programa definido, para rematar con un acto propio.

Pero esa tentativa de frente político con los K terminó con un fracaso: los “nacionales y populares” recibieron al FITU con un tome o deje: el único “acto único” posible es el que ya habían diseñado los K, con el documento para la circunstancia. Ya sin tiempo ni voluntad política de poner en pie una convocatoria independiente, los integrantes de “Memoria, Verdad y Justicia” y el FITU aceptaron, con mayor o menor entusiasmo, insertarse en el acto kirchnerista.

Implosión

A horas del 24, la evidencia de este bochorno político ha desatado una implosión en el EMVYJ: el PTS, el aparato del PO y el Nuevo Mas han anunciado que “leerán un documento propio en la Plaza de Mayo”, “una vez finalizado el acto de la Mesa de Organismos”. (¡Mesa de Organismos! Este es el nombre que le ponen al acto, que nunca denuncian, de la burocracia sindical y los K). Un comunicado separado del aparato del PO llama a participar de la marcha y de “la lectura del documento del EMVYJ en Plaza de Mayo”, después del acto oficial, sin decir una palabra del contenido de clase y de la política del kirchnerismo. El comunicado practica un confusionismo deliberado -porque no menciona los intentos reiterados de subirse al acto oficial-. No es, de ningún modo, un “documento alternativo”, porque no tiene el propósito de delimitarse políticamente de la marcha oficial.

Otra fracción, liderada por el MST y organizaciones sociales como el Frente Darío Santillán, el FOL y los ex detenidos desaparecidos, rechazó esa maniobra por improvisada, o sea contradictoria con el propósito de sumisión que guió las negociaciones con los K. En consecuencia, resolvió seguir con el plan original -o sea, participar y adherir al acto “único” (kirchnerista) sin ninguna clase de documento.

La movilización del 24 de Marzo, con la colaboración del FITU, completa una usurpación que se montó a partir de 2006. El FITU ha dejado estampada, más que en el pasado, su tendencia a la colaboración de clases en un “frente nacional y popular”.

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