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Un nene de 7 años perdió la vida a causa de una serie de disparos que ejecutó un policía en la localidad de Ciudad Evita, La Matanza. La balacera ser produjo luego de que el agente (que no se encontraba en servicio) se resistiera a un robo. Thiago Correa, se encontraba esperando el colectivo junto a su padre, cuando una bala impactó en la zona de atrás de su cabeza. Después de agonizar durante casi 48 horas, murió este viernes. También falleció uno de los asaltantes y otro quedó herido. Aguilar Fajardo, el policía que disparó está detenido por “exceso de legítima defensa”.
El episodio ocurrió el miércoles por la noche, alrededor de las 22.30, en la intersección de avenida Crovara y Madrid. Allí, Fabián y su hijo estaban en la parada cuando, según la reconstrucción de los investigadores, un agente de la Policía Federal Argentina fue abordado por cuatro delincuentes armados. El efectivo estaba vestido de civil y fuera de servicio. Se identificó como personal policial, sacó su pistola reglamentaria y comenzó a disparar. El arma de los asaltantes resultó ser de juguete. El policía disparó -como lo muestran las cámaras- una ráfaga de 11 disparos en 9 segundos. Una de esas balas impactó sobre Thiago y le quitó la vida.
“Cuando estábamos esperando el colectivo, escuché una explosión y pensé que era una moto, pero de repente empezaron a escucharse más detonaciones. Cuando me di cuenta de que se estaban agarrando a tiros, quise tirar al piso a Thiago, pero ya le había impactado una bala”, relató el padre del niño. “Cuando le da el impacto y lo tengo en mis brazos, me dice ‘pá’ y ya no dijo más nada. Empecé a gritar ‘ayuda’ y apareció un auto con un hombre que no conozco y me llevó al hospital”.
El agente que disparó la bala mortal fue identificado como Facundo Daniel Aguilar Fajardo, de 21 años, oficial ayudante de la Dirección Montada de la PFA, quien quedó detenido por orden del fiscal Diego Rulli, acusado de “homicidio en exceso en la legítima defensa”. Uno de los ladrones, Brandon Corpus Antelo, de 18 años murió tras recibir un disparo en el cuello. Otros dos, identificados como Uriel Alexis Montenovo y Uriel Emanuel Leiva, ambos de 21 años, terminaron heridos: uno con un impacto en la pierna derecha y el otro en el abdomen, en estado grave. El cuarto asaltante logró escapar. Lo que los medios presentar como un “enfrentamiento” en realidad se trató de una balacera sobre personas desarmadas que salieron corriendo cuando el oficial se identificó. Les dispararon por la espalda. En su declaración, Fajardo intentó justificar su reacción porque sintió que su vida “corría peligro”.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, salió rápidamente a justificar el accionar de la policía. Señaló en conferencia de prensa que “el oficial actuó en legítima defensa”. Pidió, además, que se cambie la calificación de la causa contra los asaltantes heridos y detenidos. Bullrich defiende a rajatabla la “doctrina Chocobar”, respaldando la brutalidad policial para ir creando un Estado de tipo policial.
Por otro lado, Bullrich responsabilizó al gobierno de Axel Kicillof por la inseguridad en la Provincia de Buenos Aires. La respuesta del gobierno bonaerense llegó en la voz del ministro de Seguridad provincial, Javier Alonso, quien acusó a Bullrich de querer “apropiarse de las víctimas”. La policía bonaerense también cuenta con un historial nefasto en casos de gatillo fácil en la Provincia. Los partidos del régimen solo intentan sacar alguna tajada electoral.
Se impone la necesidad de movilizarnos masivamente para terminar con los casos de gatillo fácil, aun contra delincuentes, que tienen derecho a una defensa en juicio y por el juicio a los responsables políticos y materiales.
Justicia para Thiago y todas las víctimas del “gatillo fácil”.
Caso Thiago: Patricia Bullrich es una apologista reincidente del delito Por Marcelo Ramal, 07/06/2025.