Escribe Gabriel Cañete, de Ezeiza. Militante de la Tendencia Docente Clasista y Delegado del SUTEBA
"Dime de qué te jactas..."
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Al escribir estas líneas todavía el fuego en el Polígono Industrial de Spegazzini de Ezeiza no ha sido totalmente extinguido, pero si "controlado", según un reciente informe de situación de la municipalidad. La explosión y el incendio se originaron cerca de las 21 horas del viernes 14 de noviembre en la planta de la empresa Logischem, dedicada al almacenamiento y distribución de productos químicos, y se propagó a unas diez empresas lindantes, como Iron Mountain, Larroca Minera, Almacén de Frío, Aditivos Alimentarios y una distribuidora Salón. Se estima que el daño en dichos establecimientos es total.
La onda expansiva de la primera explosión fue considerable, rompiendo vidrios en un radio de hasta cuatro kilómetros, y escuchada como una "bomba" en un radio de quince kilómetros. Los vecinos reportaron rápidamente un fuerte olor a químico proveniente de la zona afectada. Una nube tóxica cubrió el cielo, lo que obligó a decretar la alerta roja. Varias decenas de heridos con golpes, cortes y problemas respiratorios es lo que en primer término dejó el siniestro. Esto sumado a destrozos en decenas de hogares humildes y comercios de la zona.
El comunicado oficial del intendente de Ezeiza, Gastón Granados, en su punto 6 nos informa sobre la investigación, diciendo: "Aún no existen hipótesis firmes sobre el origen del incendio y la detonación". Dicho comunicado contrasta con los dichos y el sentir de la comunidad, que ya venían alertando sobre esto:
-Respiramos veneno
-Desde que se instalaron algunas empresas se siente un fuerte olor a alcohol o químicos
Y también acerca de quién se hará cargo:
-ahora quién nos va a pagar los daños. Somos familias humildes
Bajo la lupa se encuentra hoy el accionar del municipio en cuanto al "impacto ambiental" provocado por la instalación de empresas que manejan materiales peligrosos (químicas, plásticas) en una zona densamente poblada. Y sumado a esto el poco "control" distrital, que privilegia el lucro empresarial en detrimento de la salud de la población.
Ezeiza cuenta con varios polos, polígonos, y parques industriales. Los que en su mayoría ofrecen sueldos "de miseria" y en muchísimos casos "en negro". Mientras la intendencia mira para otro lado (los countrys de Canning) y el intendente vive publicando "reels" del distrito "feliz", Ezeiza está parado sobre una "bomba".
La importante asamblea enfrente del hospital de Ezeiza del viernes por la mañana que contó con la presencia de decenas de médicos y vecinos ante la situación de abandono del establecimiento corrobora "la desidia" distrital y provincial.
Ese es el camino: asambleas para debatir y tomar en nuestras manos nuestro futuro.
● Por una comisión independiente del estado que investigue lo ocurrido en el Polígono industrial
● Que se abran los libros sobre el "impacto ambiental" fraudulento realizado a las empresas
● Por un salario mínimo igual a la canasta familiar (hoy dos millones de pesos) y ningún trabajador en "negro".
