¿Cerdos versus vacas?

Escribe Akiva Sthisel

Tiempo de lectura: 1 minuto

El artículo de Malaj, “Acerca de la eventual inversión china en la industria del chacinado”, en el que esclarece la posición de clase y marxista relativa a un problema de producción de alimentos, con el cual coincido, a pesar de ello me atrevo a corregir ciertos errores. La producción vacuna argentina no compite con la de cerdos ni para el mercado interno y mucho menos para la exportación de carnes a China. A China se vende la vaca de descarte y, en muchos casos, incluso las vacas de tambo, o sea se destruye capital de trabajo ya que tanto las vacas en los campos (salvo las ya sin producir) como las productoras de leche, al enviarse a faena, dejan obviamente de producir carne con más terneros y leche. El consumidor chino solo utiliza como un aditivo la carne vacuna prefiriendo largamente la de cerdos o pollo, entre otras. Lo que se produce en exceso en el país son granos, que son el insumo básico de la alimentación de los cerdos y de los vacunos para consumo interno (los feedlots). De hecho, no existe otra forma de producir carne en inmensas zonas de Argentina más que a corral o suplementado, es decir que, si llevamos a cabo una política consecuente ‘’ecologista”, cómo plantea el FIT, se provocaría una agudización de los problemas de alimentación de la población de nuestro país. Los campos que en décadas pasadas se dedicaban al pastoreo extensivo (en praderas extensas) hoy se dedican a la agricultura intensiva fundamentalmente soja. Los vacunos fueron ‘’corridos ‘’ hacia zonas más marginales en lo productivo.

Suscribite al canal de WhatsApp de Política Obrera