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Nos enteramos de la muerte de Cristina Lorenzo, enfermera del Hospital Central de San Isidro, activista sindical y fundadora de ATE San Isidro. Estrechamos el abrazo a sus familiares y amigos, a sus compañeros y compañeras de trabajo y de lucha que atraviesan el duelo por su pérdida.
La compañera fue víctima de una complicación por Covid-19. La crisis sanitaria en la que vivimos por responsabilidad del Estado nos cobró, entre miles de trabajadores y trabajadoras, la de una luchadora incansable por los derechos de su clase y, en particular, de los trabajadores municipales de San Isidro. Acompañamos, como lo hicimos junto a Cristina, la lucha de las trabajadoras y trabajadores del distrito.
Despedimos a Cristina Lorenzo y queremos dejar un recuerdo que ilustra un pedacito de ella que es parte de la historia los trabajadores de la salud de San Isidro.
En el 2014, cuando el sector de enfermería impulsaba la lucha por reclamos de los trabajadores del Hospital Central, Cristina era una activista impulsora de la lucha y de la estructuración de ATE en el distrito. A mediados de año habían organizado una movilización que cortó la Avenida Centenario frente al hospital. Las reivindicaciones eran muy amplias: aumento de salarios, categorías, pase a planta permanente, régimen de franqueros, insumos sanitarios, aplicación de las condiciones legales por insalubridad, entre otras tantas. Detallaban particulares reclamos de todos los sectores del hospital. Finalizada la jornada de lucha, en una entrevista, Cristina nos dejaba el siguiente testimonio que queremos compartir:
"Lo que le diría al vecino es que esto es en defensa propia y en defensa de los vecinos. En definitiva, somos nosotras quienes los atendemos. Si el intendente puede demostrar ser exitoso es sólo por la gente que hace el trabajo, como nosotras, que tenemos que cubrir con nuestro trabajo todas las falencias. (...) En el Hospital, el gobierno municipal no reconoce la experiencia. Y se produce una migración de profesionales al sector privado. Están privatizando la salud. No hay una política para el futuro del hospital ni del sistema de salud público. Y nosotros tenemos que vislumbrar ese horizonte político en nuestra lucha".
¡Hasta la victoria, siempre!
