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La localidad de Merlo está atravesando una crisis sanitaria por el avance de la pandemia. Actualmente, según datos aportados por el ministerio de salud provincial, Merlo cuenta con 6925 contagiados y 1.700 personas infectadas en forma activa con Covid-19, aisladas en sus hogares o internadas en el sistema de salud público. Esto in contar los que se encuentran en el sistema privado. Ya suman 86 las víctimas fatales.
Los pacientes aislados están a merced de una asistencia que no llega. Las demoras en la realización de los hisopados pueden superar las dos semanas.
La situación de los trabajadores de la salud se agrava en forma alarmante. Los datos relevados por el ministerio se salud de la provincia dan cuenta que ya son 548 los contagiados del sistema sanitario en el distrito. Entre los fallecidos en agosto, hubo un médico pediatra del Hospital Maternal de Pontevedra.
En el hospital Eva Perón, el 40% de su personal está afectado.
El personal no es reemplazado, profundizando el déficit sanitario: la demanda no es atendida por coronavirus ni por otro tipo de patologías. Asimismo, ¡el 50% de las camas están ocupadas por personal de salud infectado con covid19!
El intendente Menéndez repartió 10 respiradores, monitores multiparamétricos y bombas de infusión a cinco clínicas y sanatorios privados locales. Este ´aporte´ a las patronales privadas de la salud va en línea con el que otorgó Kicillof, con fondos de IOMA, las clínicas privadas de la provincia que se declararon en quiebra. Las patronales son rescatadas mientras los sueldos de los trabajadores de salud no llegan a la línea de pobreza.
Menéndez saludó el pacto con los bonitas privados de la deuda externa. Necesitamos una salida obrera en defensa de la salud pública:
Elaboración de protocolos de seguridad e higiene controlados por los trabajadores de la salud.
Entrega del equipo profesional e insumos necesarios para evitar los contagios.
Aumento inmediato del presupuesto de la salud pública.
Centralización estatal de salud pública y privada bajo el control de los trabajadores para garantizar la atención sanitaria.
Pase a planta permanente de todo el personal sanitario.
Contratación del personal necesario bajo las condiciones de convenio.
Aumento de salarios. Mínimo igual a la canasta familiar ($80.000).
No al pago de la deuda externa.
