CENS: la lucha de los docenes de adultos recién empieza

Escribe Ezequiel Caballero

Tiempo de lectura: 4 minutos

La supresión de la educación de adultos como modalidad en la Ley de Educación Nacional dejó la puerta abierta para todo tipo de abusos contra la docencia por parte de los dos últimos gobiernos. En la Provincia existían 135 CENS en el 2015; luego de haberse dictado la Resolución 1657/17 que modificó la estructura organizacional de CENS, BAO (Bachilleratos de Adultos dependientes de Secundaria) y BAOT (Bachilleratos de Adultos con Orientación Técnica, dependientes de Secundaria Técnica), reemplazándolos por bachilleratos juveniles, a estos últimos matriculando sólo menores de 18 años y dejando en la órbita de adultos a los CENS, se profundizó una mayor precarización: al día de la fecha, faltan cargos directivos, preceptores y auxiliares.

Más de 300 bachilleratos de la escuela nocturna pasaron de ser a ser CENS y hoy existen 520 Centros Educativos de Nivel Secundario (CENS) en toda la Provincia. La implementación del programa Fines, que en un principio formaba parte de un aula de esos CENS, se fue transformando en su competencia. Cuando resolvieron la aceleración de su trayectoria pedagógica, en la que se produjo una pérdida de conocimientos y contenidos, comenzaron a competir con la matrícula de los CENS ya que muchos estudiantes, por la necesidad de tener el título, emigraron hacia los Fines porque su trayectoria es más corta. La gran dificultad de este programa se genera cuando esos estudiantes tienen que sostener la trayectoria si quieren estudiar alguna carrera de educación superior. Además, el plan Fines es de alcance federal, funciona en todas las jurisdicciones y es financiado por el Tesoro Nacional. El plan se desarrolla con dos grupos de estudiantes, “Deudores de Materias” y “Terminalidad Secundaria”; es semipresencial y se divide en módulos, mientras que los CENS tienen un plan único de tres años.

El despertar de la lucha

El despertar de la lucha de los docentes de adultos en contra de la precarización laboral e institucional comenzó en la pre pandemia, cuando numerosos docentes y estudiantes opusieron resistencia, con numerosas movilizaciones en toda la provincia al traspaso impulsado por la gobernadora Vidal de los Ex-BAO a los CENS, dejando a muchos compañeros sin trabajo o precarizados y también a miles de estudiantes desvinculados, con la complicidad de la burocracia sindical.

En plena pandemia, la DGCyE de Vila violentó las condiciones de trabajo y específicamente el estatuto docente, al no titularizar a los compañeros en condiciones de hacerlo, para que luego en pleno receso invernal en julio del 2021 (cuando la gran mayoría de docentes estaban descansando), mediante la disposición 12/2021 publicaron las vacantes de los compañeros porque solo con el movimiento había que reubicar a los 'docentes" que no tienen la antigüedad, ni los títulos para que puedan sostener la modalidad. A raíz de esta situación problemática surgió la agrupación CENS UNIDOS, que en un principio en coordinación con las seccionales de la Multicolor, con una nutrida delegación de varios distritos se movilizaron a La Plata, para manifestarse contra la disposición en la cual desplazaba a miles de compañeros o de continuar trabajando de manera precarizada en un contexto de múltiples complejidades, incluyéndose en la nómina del llamado MAD y Acrecentamiento, ya que hace durante años en adultos no se ha garantizado el derecho a la estabilidad laboral mediante titularización masiva, ya que en los antiguos BAO fueron muy pocos los docentes que pudieron titularizar sus horas o cargos.

A partir de aquí y proyectando que los mayores desplazamientos se dieran en las titularizaciones interinas, logrando con ello la finalización del proyecto educativo que tanto costó elaborar y sostener con los pocos recursos que dispone la modalidad hace muchos años, los docentes del sector nos hemos unido y organizado para que mediante diferentes acciones podamos visibilizar aún más la problemática, ya sea a través de la presentación de recursos administrativos, legales, como así también en la participación en entrevistas radiales y acciones callejeras, para que con ello se suspendiera la normativa y aprobaran el proyecto de ley de las titularizaciones masivas. Vale aclarar que los docentes de CENS en su gran mayoría sostienen la modalidad con los títulos y la antigüedad para poder titularizar, pero en ninguna de las acciones estatutarias se ha podido suspender ni aprobar el proyecto de ley que defienda a la docencia, porque dicha disposición fue aprobada en mesa de cogestión, hace un año atrás, a espaldas de los docentes para hacer el traspaso de los CENS a los Fines y de esta manera profundizar la precarización en adultos, en todo sentido.

Los desafíos de hoy

En la actualidad, más específicamente durante el 2022, la modalidad en términos generales está atravesando muchas problemáticas; desde el acuerdo paritario a la baja, la falta de recursos como personal de escuela, internet, computadoras, SAE, mobiliario, problemas edilicios, la absorción de la matrícula por parte de los Fines, la sobrecarga y la precarización laboral tanto como la institucional, y por último con la resolución 1550/21 (Tabla de correspondencia), que está en vigencia y que facilita el tránsito de los estudiantes jóvenes, adultos y adultas mayores del Programa FINES en el Sistema Educativo para garantizar la inclusión en el año correspondiente, sin repetir trayectorias que los mismos hayan realizado en algún momento de su vida y sin alterar ni modificar los puestos de trabajo de los docentes de la Modalidad, muy por el contrario, engrosa la matrícula de los segundos y terceros años que históricamente se desgrana en relación al primer año de cursada.

Todos estos ataques se llevaron a cabo en pandemia, con una inflación anual de al menos el 60%, con la aprobación del programa económico ajustador del FMI y con las reformas que exige el Fondo para beneficiar a la patronal y a la burocracia sindical y, por último, en el contexto de una tercera guerra mundial imperialista, agudizando aún más la sobrecarga y la precarización de la Modalidad en todo sentido. Para resolver las problemáticas que hay en la Modalidad y para que ningún docente se quedé sin trabajo y ningún estudiante sin docente, para frenar la profundización de la precarización en todo sentido, las comunidades educativas de los CENS tendrán que estar más que nunca, unidos y organizados, deliberando en asambleas para votar resoluciones y coordinar con otros sectores. Es necesario tomar como ejemplo la lucha de los Elefantes de Neuquén que, durante el 2021, al coordinar con las seccionales de la Multicolor y con los mapuches luego de varios meses de lucha mediante movilizaciones, cortes y huelgas, le arrancaron al Gobierno y a la burocracia sindical un aumento salarial del 50%, habiendo acordado previamente a espaldas de la primera línea una paritaria de miseria del 12% de aumento en pandemia.

Viva la lucha docente y de la comunidad educativa en los CENS. ¡Los CENS nos volveremos a poner de pie!

Suscribite al canal de WhatsApp de Política Obrera