Tarifazo en Santa Fe: un sistema de transporte público en crisis sobre la espalda de los trabajadores

La semana pasada el boleto de colectivo volvió a aumentar por segunda vez en el año, hasta ubicarse en $69,50. El aumento acumula más del 60% desde que empezó 2022.

Las patronales del transporte argumentan que el motivo que llevó a pedir la suba es el incremento del 50% en el precio del combustible. Del mismo modo, dicen que no pueden afrontar el aumento salarial de los choferes sin una inyección de recursos desde el Estado. Esto originó un conflicto que se destrabó con un aporte extraordinario de $50 millones de pesos del municipio, luego de la declaración de tres días de paro de UTA.

El servicio de transporte público de la ciudad de Santa Fe está en crisis, fruto de años de falta de inversión de las empresas de transporte y de complicidad de los gobiernos municipales. El transporte público no se licita desde 2001. Dicho contrato luego se prorrogó, sin ningún tipo de discusión, anualmente hasta el día de hoy. Por otra parte, la única normativa que regula el transporte urbano en Santa Fe data de abril de 2009.

Desde las patronales del transporte, los medios de comunicación y los partidos del régimen quieren instalar una discusión sobre la "inequidad" en la distribución de los subsidios al transporte con respecto a CABA y el conurbano.

Reclamamos que se abran los libros contables de las empresas de transportes para saber cuál es el estado real de las cuentas y el costo del servicio. Se ignora adónde terminaron los millones de pesos de subsidios como así también el número de boletos que cortan a diario y sus ganancias anuales.

La salida a la crisis tiene que partir de una reestructuración del sistema de transporte. ¡Abajo los tarifazos!