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El día jueves 25, la municipalidad de Caleta Olivia convocó a los trabajadores de planes ex Potenciar Trabajo a una reunión donde se les informó que ya no prestarán más servicios en el municipio y que, a partir de ahora, pasarían a depender de Nación. En la reunión no estuvo el intendente Carrizo, quien con el gobernador Vidal, en campaña se sacaba fotos, prometiendo garantías laborales. Este anuncio tiene la intención de seguir dando de baja a los planes. La misma política ajustadora de Milei.
Muchos de los trabajadores y trabajadoras enviados a su casa llevan más 15 años trabajando en dependencias municipales, precarizados, sin aportes jubilatorios, sin obra social, y con ingresos de indigencia. Muchas compañeras han sufrido abusos y acosos de sus responsables, bajo la amenaza de quitarlas del plan u obligadas participar de actos políticos.
La existencia de los planes dependientes del municipio ha sido la respuesta del gobierno, en ese entonces kirchnerista, ante el reclamo de puestos de trabajo genuino, dirigido a las operadoras petroleras. El gobierno, para salvar los intereses de las multinacionales, absorbió a los manifestantes bajo cooperativas o planes sociales, en sus inicios llamados “1840”, luego pasados al formato nacional de “Potenciar Trabajo”.
La adaptación a esta precarización laboral, también fue llevada adelante por las organizaciones sociales quienes desarrollaban hasta hace un mes, tareas en distintos barrios, sin insumos ni herramientas haciéndose cargo ellos mismos de su trabajo. Así se ha desarrollado una política de sostenimiento y contención de los planes, en lugar de encarar una lucha por el trabajo genuino.
Desde Política Obrera nos solidarizamos con los trabajadores y trabajadoras de los programas sociales y llamamos a organizar asambleas autoconvocadas, para reclamar la urgente creación de los puestos de trabajo en remediación ambiental, bajo la exigencia de que YPF debe cumplir con el pasivo ambiental.
Organicemos junto al resto de los trabajadores, la huelga general. Es decir, una acción conjunta que coloque todos los reclamos por el salario, los puestos de trabajo, las condiciones laborales, jubilatorias, los presupuestos de salud y educación. Estamos padeciendo un ataque general hacia el conjunto de los trabajadores: la respuesta debe ser unificada.