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El pasado lunes 5 las bolsas del mundo se hundían principalmente por una venta masiva de acciones de las tecnológicas (el principal caballo de fuerza que empuja los niveles del SP500). El suceso es comprendido en general por una confluencia de situaciones. La primera y principal una huida hacia el yen japonés por una medida tomada por el Banco de Japón (subida de tipos); un temor generalizado sobre la fortaleza de la economía norteamericana (entra en recesión?); además, algunos piensan que también ha influido un fallo histórico contra Google, una empresa de las más poderosas y tan ligada con las búsquedas por internet que su nombre se ha convertido en verbo.
Un juez del distrito de Columbia, Amit P. Mehta, ha fallado contra el gigante en una demanda que data del año 2020 -por parte del Departamento de Justicia (DOJ) en conjunto con 52 estados y territorios de EE.UU.- sobre el dominio de las búsquedas online. La sentencia dice: “Después de haber considerado y evaluado cuidadosamente el testimonio de los testigos y las pruebas, el tribunal llega a la siguiente conclusión: Google es monopolista y ha actuado como tal para mantener su monopolio.”
Como bien explica Harry First, profesor de leyes en la NYU en este video el Departamento de Justicia se tomó una siesta de 20 años para actuar contra este gigante (y otros), ya que el último fallo de ésta envergadura había sido contra Microsoft en 1998, sobre el dominio de navegador de internet(IE). “..tiempo en que estas plataformas de Big Tech que conocemos llegaron a dominar la economía de los EE. UU., tiempo en que estaban creciendo y básicamente crecieron sin provocar ningún fuego antimonopolio.”
Estás Big Tech han sido protagonistas y han desfilado varias veces estos últimos años por el Congreso por distintas cuestiones, seguridad nacional, protección de datos y hasta daños severos a la salud mental de la juventud. La causa contra Google es antecedente de otros procesos en curso contra Amazon, Meta, Apple, etc. Incluso el mismo Google el próximo mes tendrá que enfrentar otro proceso, en este caso por su monopolio sobre la publicidad en internet.
Durante el juicio, el director ejecutivo de Microsoft, Satya Nadella (AKA la competencia), testificó que le preocupaba que el dominio de su competidor hubiera creado una “red de Google” y que su relación con Apple fuera “oligopólica”. “Si Google continúa sin inmutarse, es probable que se convierta en dominante en la carrera por desarrollar inteligencia artificial”.
Este nuevo recurso se suma a los que ya tiene abiertos en Bruselas, donde el grupo digital ha recibido un examen exhaustivo hasta ahora. Sobre él pesan las multas más cuantiosas de la historia de la Comisión Europea: más de 8.000 millones de euros por tres casos que, por ahora, apenas está logrando rebajar en los Tribunales. Precisamente a la vuelta del verano se espera el fallo definitivo de uno de esos casos: el de Google Shopping, 2.424 millones por privilegiar en las búsquedas sus servicios de compra y los de sus anunciantes en las búsquedas de Internet.
La causa contra Google está basada en los acuerdos que montó el gigante de Mountain View (California) con empresas proveedoras de internet, fabricantes de dispositivos móviles y exploradores de internet, para ser éste el buscador “por default”. Para eso habría pagado decenas de miles de millones de dólares hasta la fecha, en acuerdos que violan las leyes de competencia que tienen más de 100 años de existencia(ha violado la sección 2 de la Ley Sherman), que en su momento fueron sancionadas para arbitrar sobre el poder de monopolios como la Standard Oil.
En palabras de Kent Walker, presidente de asuntos globales de Google "Esta decisión reconoce que Google ofrece el mejor motor de búsqueda, pero concluye que no se nos debería permitir que esté fácilmente disponible". La defensa de Google se basa en que esos “esfuerzos” son en beneficio del consumidor, que es toda la cuestión “moral” que es blandida por ambas partes.
El acuerdo de hace años de Google con Apple para convertirlo en el motor de búsqueda predeterminado en el iPhone ha sido objeto de escrutinio durante mucho tiempo. Documentos judiciales no sellados mostraron que Google pagó a Apple 20.000 millones de dólares sólo en 2022(!). Esto equivaldría a una parte sustancial del negocio de servicios de Apple de 85.000 millones de dólares al año, que incluye su App Store y Apple Pay. Google es un “socio crucial” para la manzana podrida.
Al pagar miles de millones de dólares para ser el motor de búsqueda automático en los dispositivos de consumo, Google había negado a sus competidores la oportunidad de construir la escala necesaria para competir con su motor de búsqueda. De esta manera, Google recopiló más datos sobre los consumidores que utilizó para hacer que su motor de búsqueda fuera mejor y más dominante. Además, el DOJ acusó a Google de proteger un monopolio sobre los anuncios que aparecen dentro de los resultados de búsqueda. Los abogados del gobierno dijeron que Google había aumentado el precio de los anuncios más allá de las tarifas que deberían existir en un mercado libre (por eso el juicio que arranca el mes que viene), lo que, según ellos, era una señal del poder de la empresa. Los anuncios de búsqueda proporcionan miles de millones de dólares en ingresos anuales a Google; el monopolio de Google le permitió inflar los precios de algunos anuncios de búsqueda. Esto, a su vez, le dio a la compañía más dinero para pagar para que su motor de búsqueda obtuviera una ubicación privilegiada. "Los aumentos de precios sin restricciones han impulsado el dramático crecimiento de los ingresos de Google y le han permitido mantener ganancias operativas altas y notablemente estables" (New York Times 05/08/2024).
Google argumentó durante todo el juicio que su motor de búsqueda se enfrenta a la competencia de personas que buscan información en otros lugares, como en Amazon, TikTok y Reddit y cada vez más a través de chatbots como ChatGPT. Lo cual ante tamaña evidencia es tan ridículo como decir que la gente también le pregunta a su pareja y consulta con el psicólogo.
El proceso sobre qué hacer con el monopolio de Google sigue por otro curso. La justicia no se ha expedido en ese sentido. Si bien en nombre de “los consumidores” Google va a apelar el fallo, una posible medida sería que el tribunal impidiera que Google pagara para asegurar una ubicación privilegiada y que se divida de su negocio de publicidad.
Apple ha estado “tranquila”. Pero es probable que esté profundamente involucrada en la siguiente fase del caso. "El impacto más profundo de la sentencia probablemente lo sentirá Apple". Esta podría crear su propio motor de búsqueda. Aún no lo ha hecho, y el juez del caso no llegó a estar de acuerdo con el Departamento de Justicia en que el acuerdo con Google equivalía a una “compensación” a Apple para mantenerla fuera del mercado de los motores de búsqueda. Un estudio interno de Apple de 2018, citado en la opinión del juez, encontró que incluso si lo hiciera y mantuviera el 80 por ciento de las consultas, seguiría perdiendo 12 mil millones de dólares en ingresos en los primeros cinco años después de separarse de Google. Según una investigación del Tech Transparency Project (TTP) Apple gastó 9,9 millones de dólares en cabildeo ante el gobierno federal en 2023, la cifra más alta en 25 años, aunque todavía mucho menor que el resto del pelotón tech.
Apple no es la única empresa potencialmente afectada por el fallo del lunes. Según el tribunal, el pago de Google a Mozilla en 2021 por la posición predeterminada en su navegador fue de más de 400 millones de dólares, alrededor del 80 por ciento del presupuesto operativo de Mozilla (FT 07/08/2024).
Estas empresas ensombrecen el panorama de la burbuja especulativa en la bolsa, algo que preocupa a los timberos ha sido el aumento en los gastos de capital cada año por parte de las tecnológicas de mayor tamaño. La inversión en infraestructura para la nube, es decir, centros de datos, principalmente por la corrida de la IA, es un factor que amenaza con desequilibrar los retornos para el inversor: UBS anticipa que los gastos de capital de las grandes tecnológicas crecerán un 43% interanual, frente al 24% de previsto en beneficios (CincoDias - El pais 07/08/2024).
A todo esta “incertidumbre” las tecnológicas responden con la certidumbre de cientos de miles de despidos en el sector estos últimos años. Alrededor de 745 tecnológicas han despedido a 185.867 empleados desde finales de 2023, según la consultora Trueup
Este descalabro económico producto del entrelazamiento de servicios inmensos y empresas gigantes, es una muestra de cómo una medida destinada a “ordenar” bajo las condiciones del desarrollo capitalista presente, no puede escapar a fomentar todo lo contrario, una mayor desorganización.