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Entre las 5 de la mañana y las 14 horas de hoy, no salieron los vuelos de Aerolíneas Argentinas de Aeroparque ni Ezeiza, por una huelga convocada por APLA, la Asociación de Pilotos. Además, se plegaron a la medida la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA), Asociación del Personal Aeronáutico (APA) y la Unión del Personal Superior y Profesional de Empresas Aerocomerciales (UPSA). El paro es por un largo reclamo de aumentos salariales, que comenzaron con asambleas y que ya agotaron la instancia de la conciliación obligatoria.
La semana pasada los trabajadores habían realizado asambleas de tres horas en Aeroparque, Ezeiza y aeropuertos del interior como Mendoza y Córdoba. El gobierno las denunció como una medida de fuerza encubierta. El contundente paro aeronáutico de hoy es también una respuesta al anuncio del vocero oficial de que se descontarían desde $50.000 hasta $150.000 del sueldo de los trabajadores por las asambleas de la semana pasada.
Un “salvaje” atraso salarial
El motivo del conflicto es el *impasse *de las negociaciones entre Aerolíneas Argentinas (AA) y los gremios de aeronavegantes por las paritarias. Juan Pablo Brey, secretario general de Aeronavegantes, sostuvo: “Después de meses de intensas negociaciones y de poner todo nuestro esfuerzo para evitar este conflicto, no tenemos más opción que llevar adelante estas acciones hasta recibir una oferta adecuada y acorde con la inflación”. Y agregó: “Necesitamos una propuesta seria y acorde con nuestras demandas de recomposición salarial”. Los gremios aeronáuticos venían aceptando acuerdos a la baja durante todo el año. El atraso salarial, según el propio Brey, es de un 72 % comparado con la inflación acumulada desde noviembre pasado hasta hoy. Brey expresó que las propuestas de AA, en las mesas de negociaciones que realizaron el lunes y martes pasados por las paritarias, fueron “una falta de respeto”: Aseguran que la empresa ofreció 3,5 % de aumento en junio, 3 % de julio y subas por productividad. También afirmaron que habrá penalizaciones por estas medidas.
El Gobierno dejó en claro que, detrás del conflicto salarial, la discusión de fondo es la privatización de Aerolíneas Argentinas, de Intercargo y de todas las rutas comerciales. El secretario de Transporte de la Nación, Franco Mogetta, dijo, frente a los máximos dueños de las empresas organizado por la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) y el Consejo Internacional de Aeropuertos para América Latina y el Caribe (ACILAC), que “no vamos a ceder ante la extorsión”.
