San Isidro: varieté musical latinoamericano contra el ajuste de Milei en Educación
Escribe Margarita Cuellar
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El pasado sábado 5 de octubre realizamos una varieté musical en nuestro local de Boulogne, en San Isidro. En esta oportunidad la noche se iluminó con la escuela de canto Rosana Carrasco. Una demostración del arte que corre en las venas de los trabajadores, es que Rosana es una docente que a todo pulmón levantó un centro cultural para la juventud. En la muestra musical contó con Nicolás Rojas con canto melódico. El artista Gonzalo Martínez realizó baile folklórico, salsa centroamericana y cumbia santafesina y Nicolás Martínez, cuarteto cordobés.
Por su parte, Nahuel Castillo tocó cumbia colombiana y Naila Martínez, salsa de Puerto Rico. Patricia Costas nos deleitó con cachaca mexicana y Lorena Barcala con salsa cubana y chacarera santiagueña. Lucía Ebeqqe, baile carnavalito y melódico chileno. También la directora de la escuela de canto, Rosana Carrasco, nos asombró con su zamba salteña. Hubo un momento para la intervención política, que quedó en manos del compañero Juan Linarello. Expuso el peligro para la humanidad que significa la proliferación de las guerras en Palestina y Ucrania. Realizó un extenso detalle del ajuste de Milei en Educación y llamó a movilizarse por Palestina el lunes y el miércoles 9 al Congreso contra el veto de Milei a las universidades públicas.
La noche se completó con los artistas del “Grupo de Boulogne”, que se formó a partir de las jornadas culturales realizadas el año pasado. Allí asistieron Ezequiel Jayo, que leyó unos poemas de su autoría como La noche se cerró, con los profesores de música Pablo Ojeda, de San Martín, que tocó murga uruguaya, y Santiago Poey y Eric Tálamo, que tocaron un mix de rock nacional.
Durante la varieté musical explicamos la lucha de nuestro partido por su legalidad y la importancia de estar en las próximas elecciones: el público respondió muy bien con adhesiones y afiliaciones y llevándose nuestro periódico Política Obrera. Queremos convertir nuestro local en un punto de referencia para el encuentro de los trabajadores con la cultura, para enfrentar los ajustes de todos los gobiernos, que nos limitan cada vez más el acceso a los bienes culturales.
