Los jubilados no dejamos las calles

Escribe Charly Petrillo – Jubilados Clasistas

Tiempo de lectura: 2 minutos

El miércoles 6 las agrupaciones de jubilados que nos autoconvocamos en el Anexo del Congreso Nacional, realizamos un acto frente al PAMI central en pleno microcentro porteño.

Los reclamos fundamentales fueron por la quita del 100 % de medicamentos esenciales y la precariedad absoluta de las prestaciones. En los últimos días, no hubo entrega en las farmacias de medicamentos recetados (según los directivos, por una falla del sistema).

El otro reclamo histórico es la denuncia de la intervención del organismo, que debería ser dirigido por sus afiliados y trabajadores.

En la reunión con los representantes de nuestra obra social no obtuvimos respuesta alguna a nuestros reclamos. Solicitamos una audiencia con el director del PAMI para la semana entrante.

La perversidad del gobierno liberticida de Javier Milei y de todo el arco político que gobernó -radicales, peronistas, massistas y macristas- y lo apoyan, es mayúscula. Del mismo modo que la burocracia sindical, cómplices de los brutales ataques a nuestras condiciones de vida.

Terminado el acto frente al PAMI, marchamos por la calle Florida. La columna era aplaudida por todos los que transitaban el microcentro.

Cuando nos dirigíamos por la vereda de Avenida de Mayo hacia el Congreso para nuestra llevar a cabo protesta habitual, un compañero que portaba una bandera se cayó frente a la policía que custodiaba celosamente nuestra marcha y fue golpeado brutalmente por los efectivos. Otro compañero que fue en su ayuda fue detenido.

Después de una hora de tires y aflojes, y rodeados de decenas de policías, logramos la liberación del compañero detenido y mandar en una ambulancia al compañero agredido para que fuera atendido. Un triunfo de la tenacidad de los compañeros.

Nos dirigimos hacia el Congreso, y culminamos, como todos los miércoles, marchando alrededor del mismo y con semaforazos en la esquina de Callao y Rivadavia. Cientos de policías armados hasta los dientes no lo pudieron evitar.

Haberes mínimos de indigencia -noviembre, con bono incluido, serán de $ 320.000-, medicamentos por las nubes y un PAMI que no responde, con demora de hasta 8 meses para conseguir turno... Unamos nuestra lucha a los obreros, a los estudiantes, a los trabajadores de la salud, a los desocupados, impulsemos y organicemos la huelga general que frene esta barbarie.

Te esperamos todos los miércoles, a las 15 horas., en el anexo del Congreso.

Los jubilados no dejamos las calles.

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