Escribe Littio
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El pasado miércoles en Ámsterdam, Holanda, se disputaba un partido de la Euroleague entre el Maccabi de Tel Aviv y el más que conocido Ajax. Producto de este evento se habían organizado una serie de protestas para expresar descontento por la realización del partido, en las cuales se adornó varios edificios y propiedades aledañas con banderas palestinas; en contra de la masacre que se perpetra en Gaza y se expande por todo el medio oriente por parte del Estado de Israel y el imperialismo norteamericano.
La noche del mismo miércoles, barras del Maccabi causaron disturbios, arrancando banderas palestinas, agrediendo a personas de origen árabe y lanzando consignas anti Gaza. Entre sus eslóganes se incluyeron frases como “No hay escuelas en Gaza porque no quedan niños,” “A la mierda Palestina,” “Las Fuerzas de Defensa de Israel [IDF] se cogen a los árabes" y “Muerte a los árabes, ganaremos.” También golpearon taxis conducidos por choferes árabes con barras de hierro y destrozaron propiedades. Además, se informó que se negaron a guardar un minuto de silencio en el estadio por las víctimas de las inundaciones en Valencia, aparentemente en protesta por el apoyo de España al reconocimiento de un Estado palestino. Todo esto provocó una reacción inmediata de los residentes, quienes se organizaron y los enfrentaron. De acuerdo con el concejal de la ciudad de Ámsterdam, Jazie Veldhuyzen, “los habitantes se movilizaron en respuesta a los ataques iniciados por los hooligans, quienes habían comenzado con actos de vandalismo y agresión en la noche del miércoles”.
Se sospecha que los servicios de inteligencia israelíes, específicamente el Mossad, podrían haber estado involucrados en los disturbios. Horas antes del partido se reportó en medios neerlandeses, como De Telegraaf y Voetbalzone, que agentes del Mossad estarían acompañando a los fanáticos de Maccabi “para protegerlos de los manifestantes neerlandeses pro-palestinos”.
La policía de Ámsterdam respondió con una persecución; al menos 62 personas habían sido detenidas en una ola de arrestos en toda la ciudad, aunque luego confirmó que los disturbios habían sido causados por los barras. La situación escaló con la prohibición de nuevas manifestaciones emitida por la alcaldesa de Ámsterdam, lo que llevó a la detención de más de 100 activistas que desafiaron la orden este domingo en la Plaza Dam con mensajes como “Palestina libre” y “Ámsterdam dice no al genocidio".
Bill Ackman, un prominente gestor de fondos de cobertura en Estados Unidos y ferviente defensor de Israel, anunció sus planes para retirar de la Bolsa de Ámsterdam a Pershing Square, a fin de reforzar la presión económica, aduciendo "abandonar una jurisdicción que no protege a sus turistas y poblaciones minoritarias".
Lo que fue una protesta legítima y una reacción ante los ataques fascistas es presentado por la peor calaña de embusteros como “antisemitismo”: “Los ataques antisemitas contra los aficionados al fútbol israelí en Ámsterdam son despreciables y evocan momentos oscuros de la historia cuando los judíos fueron perseguidos. Hemos estado en contacto con las autoridades israelíes y neerlandesas y apreciamos el compromiso de las autoridades holandesas de responsabilizar a los perpetradores. Debemos luchar incansablemente contra el antisemitismo, dondequiera que surja.”, Joe Biden; “terrible ataque antisemita”, Dick Schoof (PM Paises Bajos); “Un pogromo en las calles de Ámsterdam”, “Musulmanes con banderas palestinas cazando judíos. NO lo aceptaré. NUNCA. Las autoridades serán responsables por su falta de protección a los ciudadanos israelíes. Nunca más.”, Geert Wilders (líder Partido por la Libertad); “Condeno firmemente la violencia que evoca las horas más horribles de la historia”, Macron.
El criminal de guerra Netanyahu, sensibilizado, calificó lo sucedido como “violencia horrorizante”, un evento de "máxima gravedad" y exigió una “acción vigorosa y rápida” por parte de las autoridades.
También anunció que había dado instrucciones al Mossad para que desplegara agentes en futuros eventos deportivos internacionales en los que participen equipos o atletas israelíes. Su orden implicaba preparar "planes de acción, sistemas de alerta y una organización adecuada" para manejar esta “nueva situación”. Este anuncio subrayó la intención de Israel de incrementar las medidas de seguridad en el extranjero; por lo pronto se puede esperar más de estas provocaciones planificadas para justificar una mayor represión e intentar blindar la política criminal que se pretende llevar hasta el final. No se puede esperar menos de los que hacen alusión a la profecía de Amalek para justificar cualquier acción en nombre de una superioridad, en este caso “religiosa” y un derecho “divino” sobre las tierras palestinas.
Europa es el occidente "más próximo", un volcán de contradicciones producto de las guerras de Ucrania y Medio Oriente y de la decadencia histórica de estos Estados. Citamos este informe de Amnistía Internacional, en el que se explica cómo ha avanzado en Europa la demonización, limitación, represión e infiltración policial de las protestas y movimientos de lucha en general y en particular de la lucha palestina: “El uso de una retórica demonizadora por parte de figuras políticas de alto nivel ha sido particularmente frecuente en respuesta a las protestas en solidaridad con el pueblo palestino”.
Es una política desplegada a nivel internacional por parte del imperialismo -acá en Argentina Felipe Sola hizo aprobar en todas las legislaturas una ley que criminaliza la lucha contra el Estado asesino de Israel, apoyado hasta por los diputados del FITU -, que tiene como objetivo desmoralizar y desmovilizar a las masas en vistas de una mayor conmoción social y política. Una victoria como la de Trump será utilizada para reforzar a estos movimientos y clanes derechistas, contra los derechos más elementales de la democracia política como puede ser blandir una bandera palestina al grito de Israel Genocida. Los trabajadores tenemos que responder con la solidaridad y con una campaña internacional que coloque en la agenda de los trabajadores la lucha contra la guerra mundial y por el fin del genocidio.
Este viernes 15 convocamos 17 horas a movilizar, en el marco de “la Semana Mundial de Solidaridad con Palestina y de Acción Global por sanciones a Israel”, desde plaza Italia hasta la embajada norteamericana. ¡Abajo la guerra imperialista! ¡Fuera Israel de Palestina! ¡Por la unidad obrera entre árabes y judíos! ¡Por la unión socialista de los pueblos del Medio Oriente!
Barras bravas sionistas asaltan Ámsterdam El Mossad acompañó el operativo antipalestino. Por Silvina Yoga, 11/11/2024.