Qué significa la caída de la ‘Ficha Limpia’

Escribe Marcelo Ramal

El despotismo libertario tiene un “lugarcito” para los pactos políticos.

Qué significa la caída de la ‘Ficha Limpia’

Tiempo de lectura: 3 minutos

Las horas que pasaron desde que el Senado rechazó la ley de Ficha Limpia por un voto fueron suficientes para sacar a luz lo evidente: el proyecto que sacaba a Cristina Kirchner de las elecciones nacionales fue boicoteado por el propio gobierno de Milei. Los dos senadores misioneros que sorpresivamente lo votaron en contra responden al exgobernador Rovira, un colateral del gobierno libertario. Esos mismos senadores habían votado todas las leyes propuestas por Milei en el último año y medio. Si ahora lo hicieron contra “ficha Limpia”, fue por indicación de Rovira, o sea, de Milei. Rovira es la cabeza de un conglomerado empresarial que detenta, entre otras emisoras, a la radio de streaming “Carajo”. Es la sintonía que vomita los programas del Gordo Dan, el tuitero oficial de Milei.

A la hora de explicar la decisión de Milei de boicotear la ficha limpia, los comentaristas políticos son rebuscados. Dicen que los libertarios no quisieron “darle al macrismo una victoria” a pocos días de las elecciones porteñas. La autora del proyecto de Ficha Limpia es Silvia Lospenato, cabeza de la lista de candidatos a legisladores del PRO. Otros razonan que Milei no quería colocar a Cristina en condición de víctima o perseguida, y ofrecerle un flanco de reivindicación política.

Pero la cuestión es más directa y sencilla. Milei y su banda nunca quisieron la aprobación de la “Ficha Limpia”. La corriente política internacional que enlaza a los Milei, Bolsonaro, Trump y otros transitan entre la violencia criminal y la delincuencia económica. Cualquier “ficha limpia” dejaría a estos exponentes de la lumpen burguesía internacional fuera de carrera. Es lo que ocurre ahora con otra derechista, Marine Le Pen, quien imitó las mañas del puntero bonaerense “Chocolate” Rigau pero en el elegante Parlamento Europeo. La “ficha limpia” pretende subordinar el derecho a la postulación política y la soberanía popular al aparato más conservador y manipulable de los estados capitalistas, que es el poder judicial.

La ultraderecha internacional se arroga para ella la prerrogativa de la persecución política y los regímenes de excepción, pero no quiere poner a sus propios gobiernos bajo la lupa de otra camarilla reaccionaria – la de los jueces. El mencionado Dan fue muy claro cuando “Ficha Limpia” se estaba por tratar en Diputados: “Si se hubiera aplicado (ficha limpia) en Estados Unidos, Trump no sería presidente”, tuiteó el anónimo mileista, Gordo Dan.

‘Ficha Libra’

Ya bajo las actuales condiciones políticas, los libertarios tienen una poderosa razón para boicotear la Ficha Limpia. Se trata del caso $Libra, que ganó su lugar en la Justicia argentina y en la de Estados Unidos. Las evidencias de participación directa de la familia presidencial en esta criptoestafa son abrumadoras. Por ahora, el gran capital nacional e internacional, que lucra generosamente con la deuda pública y la confiscación de trabajadores, miran al criptodelito de Milei con indulgencia. Pero en el caso de un desbarranque financiero o político, el destino de Milei y Caputo se jugará en Devoto o Marcos Paz.

Hasta comienzos de este año, el juego de extorsiones entre Milei y Cristina en torno de la Ficha Limpia tenía como contrapartida al nombramiento de Ariel Lijo en la Corte Suprema, que requería de los votos de los senadores K. El fracaso de la designación de Lijo dejó al kirchnerismo sin este recurso para frenar la Ficha Limpia. Pero la aparición de “Libra” les ha brindado otro elemento de extorsión: el canje de Ficha Limpia por la criptoestafa. El naufragio de la “Ficha Limpia” no cancela este ‘toma y daca’: por el lado de Cristina, lo traslada a la Corte, que tiene en sus manos confirmar los dos fallos condenatorios en el caso Vialidad o, en su defecto, postergar una decisión al menos hasta después de las elecciones.

Los “consensos” del gobierno liberticida

El episodio Ficha Limpia es muy instructivo para caracterizar al régimen político. El gobierno de vetos y decretazos no opera en un vacío: se abre paso a través de un abanico de componendas que abarca a todos los partidos capitalistas, incluso y principalmente al kirchnerismo -sus gobernadores, sus parlamentarios, su burocracia sindical-.

Suscribite al canal de WhatsApp de Política Obrera