Escribe Julio Gudiño
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La Comisión Directiva del SUTNA, reducida por la salida de quienes han formado la lista Azul, convocó a un paro de 8 horas con movilización a la Secretaría del Trabajo sede Callao “En defensa del salario” y “Contra las importaciones que reemplazan la mano de obra argentina”, entre otras reivindicaciones. La medida había sido estipulada, en primera instancia, para el 1º de agosto, pero se postergó para el martes 5, por “múltiples compromisos” -entre ellos, el traspaso a una nueva prestadora de la obra social- y “desavenencias climáticas”.
La paritaria del Neumático está en una completa crisis. Los trabajadores no tienen aumento salarial desde enero, la paritaria 2024-2025 está vencida y no hay novedad sobre inicio de la paritaria 2025-2026. La propuesta que llevan las patronales a todas las audiencias implica una rebaja de salario real en medio de una ola de despidos masivos que dejo al 40 % de la fuerza de trabajo del Neumático en la calle. Hace 3 semanas, el mismo día que sesionaba la Asamblea de Junta Electoral, la patronal de Pirelli apretó a 27 compañeros para que acepten su propio despido y logró, con amenazas de todo tipo, que 25 compañeros agarraran el “retiro voluntario”.
La CTA-A confirmó que participará de la movilización con una delegación “para fortalecer la unidad de clase” en el “marco de una unidad de acción” que no contempla, ni por asomo, impulsar huelgas parciales en la perspectiva de la huelga general. La CGT, silencio de radio y, al mismo tiempo, negociando con el gobierno la reforma laboral. El Secretario General del SUTNA, Alejandro Crespo, devolvió el gesto de “acompañamiento” de la CTA-A con la promesa de que el SUTNA participará de la movilización de San Cayetano promovida por el “Frente Sindical por la Soberanía, el Trabajo Digno y el Salario Justo”. El SUTNA se alejó de la CTA e incluso votó incorporarse a la CGT, por iniciativa del aparato del PO, pero quedó en solitario cuando no prosperó una alianza con el excamionero Pablo Moyano, que quedó radiado de su sindicato. Un paro aislado de ocho horas tiene más el aire de un acto de campaña electoral para adentro del sindicato, que de un plan de lucha.
