La huelga docente autoconvocada en un momento decisivo

Escribe Julio Quintana

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La imposición de las bases docentes de continuar la huelga autoconvocada hasta este viernes a la dirección de los “autoconvocados de la plaza”, desató una fuerte pugna entre quienes pelean por el triunfo de la lucha y quienes intentan derrotarla.

Las bases defienden el paro

La continuidad del paro animó a una camada de activistas a tomar la iniciativa. Esto llevó a una multitudinaria marcha el miércoles por la noche en capital, que se replicó en el interior en varios departamentos. El jueves y viernes, se han convocado otras marchas por la mañana y concentraciones en las plazas y al costado de las rutas como Güemes, El Carril, o Chicoana. Varios grupos se han lanzado a recorrer establecimientos y dar el debate por grupos de WhatsApp, ganando a otros compañeros al paro. Gracias a todo esto, el acatamiento sigue alto y el activismo entiende que el paro crece y recién está en sus inicios. Algo plausible si se tienen en cuenta las anteriores huelgas autoconvocadas.

En capital y en otros departamentos, decenas de docentes se han organizado para exigir asambleas departamentales, lo que fue rotundamente negado por los delegados “autoconvocados de la plaza”, que afirman tener una organización y métodos propios, dejando en claro que no son las asambleas democráticas ni el sometimiento de los delegados a la elección y el mandato de las bases. Ante ello, docentes capitalinos convocaron a una asamblea en capital este viernes.

ATE docentes, por último, ha llamado a un paro de 24 horas para este viernes bajo la presión de sus bases; lo que le ha abierto una crisis con los sectores de salud, municipales y la centralizada (personal de los ministerios y gobernación), que exigen que el paro sea de todos los estatales y sumarse en pleno a la lucha de la docencia autoconvocada.

Orán y San Martín

En estos dos departamentos del norte de la provincia, el segundo y el tercero respectivamente en cantidad de población e importancia después de capital, otrora epicentros de las huelgas autoconvocadas, el movimiento sigue en un impasse.

En Orán, los delegados de la huelga anterior, ligados al MST, recién han comenzado a convocar iniciativas pero bajo el pliego de los “autoconvocados de la plaza”. Hasta el 2021 eran la principal referencia de lucha contra las maniobras burocráticas de sus ahora socios. Recién para este viernes llamaron a una asamblea departamental ante la desconfianza de un sector de las bases.

En San Martín, los compañeros de la Tendencia Docente Clasista han impulsado asambleas. El paro crece en el departamento pero por ahora es minoritario. Allí pesan las 117 cesantías de Sáenz como en ningún otro lugar, donde casi hay un cesanteado por establecimiento. Los cesanteados eran la vanguardia y dirección del movimiento en el departamento, junto con compañeros de la Tendencia Clasista Docente.

Maniobras contra la huelga desde todos los flancos

Ante la crisis de la intergremial, Sáenz ha apretado las clavijas sobre los burócratas para disciplinarlos. Sitepsa ha hecho públicas las amenazas de sanciones gremiales y hasta de cesantías sobre la docencia, lo que ha llevado a su directiva a volver al redil del gobierno.

Fernando Mazzone, secretario general de ADP, afirma que no haber firmado el acta paritaria última no significa su rechazo. También dijo que no iría jamás a un paro que sirva de cobertura a los autoconvocados y que, en cualquier caso, si resuelve un paro vendrán las faltas injustificadas. El burócrata omite decir que él mismo, junto con la intergremial, exigió los descuentos y cesantías a los autoconvocados en 2023 por no parar bajo las condiciones y el “manto legal” de los sellos sindicales. A la vez, echa por tierra el argumento de que los descuentos y las faltas injustificadas se dan por falta de amparo “legal” de los sindicatos reconocidos por el Estado.

En el caso de los “autoconvocados de la plaza”, más por terror a una potencial irrupción de la masa docente contra su autoproclamada representación de las mismas que por los aprietes del gobierno, han adelantado para el viernes la asamblea provincial que todo el mundo esperaba para el sábado. Un boicot directo a la asamblea de capital y la de Orán y otras del interior que se realizan ese mismo día para preparar su asistencia a una asamblea provincial. No está claro, por otro lado, si han podido doblegar a sus propias bases de los departamentos del sur provincial y el valle de Lerma, para levantar la medida de fuerza. Lo cierto es que un eventual levantamiento de la huelga en curso en las actuales condiciones impondría descuentos y faltas injustificadas a miles de docentes sin mejora alguna del salario a la miseria ya ofertada por el gobierno.

Tampoco sería un respiro para desarrollar más fuerzas, algo que no ha preocupado a la dirección de los “autoconvocados de la plaza”, ni antes ni en el transcurso del paro actual.

Final abierto

Los próximos acontecimientos develarán si se impone el gobierno, con sus aliados sindicales de afuera y de adentro de la autoconvocatoria, o la aguerrida docencia salteña autoconvocada. Decenas de activistas se encuentran peleando por la defensa de la huelga en curso y en este campo se inscriben los compañeros de la Tendencia Clasista Docente y de Política Obrera.

En cualquier caso, ha quedado claro que el gobierno ha fracasado en su intento de enterrar la autoconvocatoria docente, algo exigido a viva voz en la última huelga de 2023 por el conjunto de las cámaras patronales de la provincia y por los burócratas sindicales. La huelga en curso es un episodio de una lucha más general, signada por una tendencia creciente a la lucha, acicateada por los salarios de miseria, el cuadro policíaco al interior de las escuelas y la creciente crisis edilicia y social de la educación, por un lado; y un régimen político y social cada vez más enfrentado con los reclamos más elementales de los trabajadores y explotados.

Revista EDM