Que se juega en las elecciones de Santa Fe

Escribe Agustín Fernández

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El último tramo de la campaña electoral en Santa Fe trae muchos condimentos a la crisis política que socava al gobierno libertario y al régimen político. Todas las encuestas descuentan una victoria del peronismo, en algunos casos arañando el 40%, comandado por Ciudad Futura, que encabeza la lista como prenda de unidad ante la atomización del PJ.

Por detrás, el podio aún no se define. Algunos indican que LLA podría ganarle a la candidata de Pullaro, Gisela Scaglia, actual vicegobernadora por la alianza de Provincias Unidas. Un 15% para el gobernador que acaba de reformar la Constitución, que se jacta de ser presidenciable y que se ha reunido estos últimos días con el círculo rojo, expondría que la virtud de estadista en realidad es una ilusión. Principalmente, porque perder ante el candidato libertario, que no tiene referencia alguna, es una desautorización política enorme. Este riesgo ha lanzado al propio Pullaro a ponerse la campaña al “hombro”, inclusive violando la ley electoral con la batería de “inauguraciones” adelantadas que está haciendo a días de la elección. Pero por más obra pública que presente, no podrá desvincularse del deterioro político que implicó aplicar la motosierra. Ha recaído en el cinismo de criticar que el ajuste libertario a destruido salarios y jubilaciones, que la “gente la está pasando mal”. Habría que recordarle que con su política miles de docentes y estatales han visto pisotear en estos últimos dos años sus salarios, su salud y sus jubilaciones. Toda esta bronca se hará sentir.

Tal disputa derechista ha caldeado inclusive sus discursos: con una mezcla de misoginia y macartismo, han sacado a relucir que Caren Tepp viene a expropiar los grandes latifundios y socializar la propiedad privada, apelando a la IA y a fake news. Ninguna lista apañada por el lobista del agronegocio, el senador Armando Traferri, podría impulsar una agenda de ese tipo. Al margen de que la candidata ha despejado toda duda de que ese no es su planteo político, lo cierto es que la agitación en general se ha consagrado abiertamente reaccionaria. Libertarios y pullaristas han acudido al lenguaje vulgar y soez para cosechar algún voto, que en definitiva son una confesión de parte contra los derechos y movimiento de mujeres y la clase obrera como tal.

Coinciden en una agenda antiobrera de cara al nuevo congreso: reforma laboral, mediante la liquidación de las indemnizaciones; reforma penal, con aumento de delitos y penas; y exenciones impositivas al capital. Son el programa político para aplicar el ajuste sobre el ajuste. Mientras que Milei pasea por los medios diciendo que el “esquema no se cambia”, lo cierto es que la devaluación es la condición principal luego de las elecciones a pedido de Trump y el departamento de Estado. Pullaro es uno de los principales lobistas contra las retenciones y pregona una devaluación que permita a las cerealeras vender barato en el mercado internacional, Mientras tanto, se queja de que la recesión destruye la industria pero que bien mirado está permitiendo la masacre laboral para reducir el “costo laboral” y consagrar una reorganización general de la relación capital trabajo en la región, con la anuencia de la burocracia sindical que milita Fuerza Patria.

En síntesis, parte de la supervivencia de Milei y de las chances del armado de Pullaro se medirán con los resultados del domingo. No por nada Milei, a pesar de ser echado por la movilización en la ciudad de Santa Fe hace un par de semanas, eligió Rosario para el cierre de campaña. Mientras que, si Provincias Unidas queda tercera en el podio, el circulo rojo tendrá que seguir buscando un recambio fiable.

Política Obrera, que viene con una intensiva agitación pública de sus planteos, hace un llamamiento a toda la clase obrera santafesina: organicemos la bronca construyendo el partido revolucionario e inclinemos el desenlace de esta crisis a favor de los intereses de los trabajadores.

Revista EDM