Tensión en Villa Constitución

Escribe Juan Ferro

Protocolos, salarios y despidos.

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Protocolos

En la planta de Acindar Villa Constitución, los casos superan los 30 compañeros y se ha desatado una puja entre los intereses de la empresa de incrementar el proceso productivo y los protocolos que defiende el cuerpo de delegados de la planta. Santa Fe tiene un ritmo de crecimiento de contagios superior a la media del país.

Los delegados defienden, por un lado, que se realicen testeos masivos mediante un tamizaje combinado de distintos tipos de test y, a su vez, han enfocado los esfuerzos en aquellos sectores que hoy presentan un altísimo nivel de contagios.

Reclaman un programa específico en los sectores afectados para cortar la circulación, determinando la cuarentena preventiva general del sector, al menos por siete días, y la realización de un tamizaje serológico general del total de los trabajadores del sector e hisopado PCR en aquellos casos detectados como positivos en el testeo de anticuerpos.

Lo que busca esta propuesta es detener la circulación comunitaria en un sector en concreto donde el contagio de los positivos asintomáticos o con síntomas débiles esté generando la propagación del virus en el resto del plantel.

El otro gran problema con relación a la pandemia (que recorre todas las fábricas del país) es que actitud seguir frente a los llamados contactos estrechos de los casos positivos o posibles positivos. Aunque la definición de contacto estrecho está claramente estipulada en los decretos ministeriales de Nación y de la provincia, en la práctica entra en choque con los intereses de la empresa que pretende siempre minimizar sus alcances en función de sus propios intereses.

Una cuestión central del protocolo obrero, respecto de los contactos estrechos, es que hay compañeros que se sienten intimidados por la entrevista; algunos no recuerdan los posibles contactos, otros no recordaban a todas las personas con las que compartieron tiempo y espacio; y en otros casos, desconocimiento de parte de quienes entrevistan de las particularidades del sector.

El planteo de la comisión interna es que a la hora de determinar un CE se convoque no solamente al presunto contagiado sino también a un representante gremial (delegado de su sector o de la Comisión Interna) para así lograr una información precisa y adecuada que permita circunscribir adecuadamente y restringir (sin presiones patronales) la posibilidad de contagio.

La cuestión del distanciamiento en las fábricas se ha transformado en uno de los grandes roces con la patronal de Acindar.

En el caso del vestuario, se hace imposible al momento de bañarse y/o cambiarse mantener distancia y barbijos por razones obvias. Hay un reclamo especifico de descentralizar los vestuarios; avanzar en un proyecto de ampliación o multiplicación de los mismos y establecer espacios nuevos destinados a cambiarse que permitan o ayuden a esta descentralización.

Los delegados reclaman incentivos para el uso de vehículo propio para concurrir a la planta y así disminuir el número de personas que viajan en colectivos. Proponen, hasta finalización de la pandemia, un subsidio a cargo de la empresa en combustible que permita afrontar ese gasto. Esto también ayudaría a que aquellos que puedan cambiarse o bañarse en su casa lo hagan.

El protocolo planteado por la comisión interna puede ser en los próximos días un factor de choque con la empresa, pero no son solo esos los puntos de choque que se presentan en el panorama.

Salarios

La burocracia del Secretariado Nacional de la UOM ha pretendido marcar la cancha de las paritarias al acordar para la rama17 (ampliamente mayoritaria en el gremio) una “gratificación no remunerativa” de 30.000 pesos en cinco cuotas pagaderas de agosto a diciembre. El vergonzoso acuerdo de Caló encuentra, en las empresas siderúrgicas, un inmenso repudio, pues las sumas fijas no representan en los sueldos mayores ninguna mejora perceptible. La batalla del cuerpo de delegados de Acindar es que se pague un porcentaje por categoría equivalente al 25%. La empresa ha ofrecido 10.000 pesos más, en cuotas, por encima de lo acordado por Caló, propuesta rechazada por la Interna. Han comenzado acciones de lucha con asambleas por sector y luego quite de horas extras – en aquellas áreas donde hay. Hasta ahora, solo el creciente contagio del Covid en la fábrica ha retrasado la realización de una asamblea general que vote acciones para que la patronal no tire abajo los salarios siderúrgicos.

Despidos

El conflicto que se desarrolla en Tenaris -aunque la misma ha quedado reducida a una empresa de 100 trabajadores- es una lucha clave entre los metalúrgicos de Villa. Lo de Paolo Rocca en Tenaris es una verdadera provocación política, porque pretende reducir al 50% los sueldos y ha despedido a trabajadores, entre ellos, dos delegados gremiales.

El acampe instalado frente a la planta está dando sus resultados, pues al bloquear la salida y entrada de camiones, paralizó por completo la planta. Ahora Tenaris ha suspendido a todo el personal y se niega a pagar esas suspensiones, con lo que el conflicto está escalando en tensión.

La directiva de la UOM Villa Constitución da permisos gremiales a los delegados para estar presentes en el acampe y ha realizado asambleas abiertas en apoyo al conflicto, pero no ha ejercido el poder del gremio para defender a delegados reconocidos y defender el derecho de que no se produzcan rebajas salariales.

A esta hora se hace necesario un paro de advertencia de toda la seccional para ganar un conflicto donde la empresa actúa en la absoluta ilegalidad.

Protocolos, salarios y despidos van calentando la resistencia de los trabajadores a la voracidad los capitalistas. Están más que maduras las condiciones para un gran plenario de delgados de todos los gremios de Villa en defensa de la vida, los salarios y las fuentes de trabajo.

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