Escribe Leonardo Perna
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Ayer lunes al mediodía, se realizó una asamblea abierta de las organizaciones de desocupados en el obelisco con la consigna ‘Abajo el ajuste, ¡fuera el FMI!’. En las últimas semanas han tenido lugar una serie de recortes y de incumplimientos por parte del ministerio de Desarrollo Social para llevar adelante el Presupuesto de Guzmán, pactado con el FMI. En definitiva, el gobierno incumple con todos los acuerdos firmados con las organizaciones en el último mes.
Las organizaciones presentes, entre las que se encontraron el bloque de organizaciones que encabeza el Polo Obrero (Oficial), el MST-Teresa Vive, Barrios de Pie, el FOL y su frente de lucha, entre otros, ratificaron realizar una movilización para el jueves 8 de abril y una permanencia frente a Desarrollo Social. Esta jornada es continuidad de lo votado en el plenario en Parque Lezama. Ya el 18 de marzo pasado había tenido lugar una movilización a Plaza de Mayo, a la que el Polo Obrero (Tendencia) aportó una columna de miles de compañeros.
El Polo Tendencia llevó el apoyo a esta asamblea en Obelisco con un planteo de profundizar la lucha y apuntando a una convocatoria al conjunto de la clase obrera. Con una ola de contagios de covid desatada, 42% de pobreza con 3 millones de nuevos pobres, el gobierno decide profundizar el hambre y la entrega nacional. Sin importarle la cantidad de internados y muertos, como lo muestra con claridad la apertura de clases presenciales. La inflación y las tarifas de servicios públicos suben, los alquileres también, y empiezan los desalojos en las barriadas. Mientras rescatan a banqueros y se preparan a pagar la deuda, el IFE miserable no vuelve para los 9 millones que lo pidieron. En este contexto los desocupados y precarizados salen a juntar el mango sin ninguna protección sanitaria.
El Polo Tendencia también llevó la denuncia de que el ministro Arroyo amenaza con la baja de plan a todo el que no realice una contraprestación presencial, cuando todos sabemos que no hay condiciones para ello. Por 10.300 pesos, los compañeros deben jugarse la vida como mano de obra regalada a los municipios. A esta situación crítica se suma el ajuste del presupuesto social: hace meses la comida no llega a los comedores y merenderos, el gobierno pasó a incumplir los compromisos con todas las organizaciones, las propias y las ajenas.
Convoquemos a todas las organizaciones obreras combativas para establecer un plan de lucha común por las reivindicaciones piqueteras y los reclamos sindicales. Por la suspensión de la presencialidad en todos los ámbitos que corresponda, en vista del avance agresivo del virus, financiado por entero por los grandes capitales, los intereses por la deuda pública y las Leliq. Es también la oportunidad para plantear un programa que asegure la vacunación masiva, en medio de acaparamientos de dosis, vacunaciones VIP y disputa del mercado por los monopolios. Con estos planteos, seremos partícipes de la jornada de lucha prevista para este jueves 8.