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Después de abandonar la regional hace dos años, cuando la totalidad de sus militantes adherimos a las posiciones de la Tendencia Nacional, la camarilla enquistada en el CC del PO a nivel nacional ha decidido intervenir al PO jujeño, en función del adelantamiento electoral establecido por Morales. El aparato nacional del PO no ha podido ganar a nadie en Jujuy, y se vale de la usurpación legal para inscribirse en la lista que deberá presentar el FIT-U. El atropello delata que el FIT-U selecciona en los sellos, no en partidos actuantes y organizados.
En 2019, la camarilla interventora debió admitir que el PO jujeño conforme el FIT-U en las elecciones nacionales, por no tener siquiera un militante. Ahora la cosa no es muy distinta, han improvisado un “Polo Obrero”, y se ha reclutado a personas que no son conocidas por nadie en la vanguardia obrera y popular de Jujuy, y ni siquiera por el resto de los partidos del FIT-U. La vacancia del aparato es tal que el MTR y CUBA prefirió marchar con el Polo Obrero adherente a la Tendencia del PO el 18 de marzo pasado y lo mismo Barrios de Pie.
Esta intervención es posible gracias a la “reforma” de la carta orgánica del Partido del Obrero orden nacional, que surgió de un congreso trucho donde se falsificó la firma de los congresales Jujeños. Esta maniobra legal fue parte de las usurpaciones de locales y cambios de cerraduras - los métodos de toda camarilla a falta de capacidad política para defender sus propias posiciones de cara a la militancia. En Jujuy, como en todo el NOA y Santa Fe, todos los militantes pudieron leer y debatir, en todos los plenarios precongresales de cara al XXVI congreso, tanto las posiciones de la entonces mayoría del Comité Nacional cómo las de la minoría y hasta con presencia de Claudio Del Plá en los plenarios en que éste se animó a venir. Donde hubo debate político fueron derrotados sin atenuantes.
Para perpetrar su trabajo liquidador el aparato del PO nacional justifica la intervención de nuestra personería legal recurriendo a la mentira y la difamación. Afirma que hemos roto con el partido y que no tenemos una militancia activa; se olvida que la única ruptura conocida ha sido la expulsión sumaria y telefónica (como acaba de admitir Claudio del Pla) de mil doscientos militantes. Más allá de esta política liquidacionista, las imputaciones que nos dirige el aparato son insostenibles ante cualquier luchador de la provincia, ya sean los obreros azucareros, los mineros, las madres “del dolor” que luchan contra la impunidad por los femicidios y muertes de sus hijos, los docentes y trabajadores de la salud, los trabajadores desocupados de las barriadas más pobres, los combativos obreros municipales, o el resto de las organizaciones piqueteras y hasta los militantes del PTS y el MST. Mientras la cuarentena política del aparato nacional del PO en Jujuy precede a la pandemia, el PO jujeño ha sido participe activo de todos los grandes eventos de la lucha de clases y nuestro compañero Iñaki Aldasoro se ha convertido un claro e indiscutido referente público del FIT jujeño. Este Primero de Mayo haremos un acto que cuenta con la adhesión del Seom (municipales), la corriente sindical Marina Vilte, las madres del dolor, el Fol, CUBa y Barrios de Pie.
Mientras el aparato del PO maquinaba como liquidar al PO jujeño, hemos derrotado un intento de sanción por parte del gobierno de Morales junto a decenas de organizaciones políticas, sociales y sindicales sin recibir siquiera muestra alguna de solidaridad de éste aparato. Tampoco abrieron la boca sino hasta hace un mes, contra el atropello de Morales a todo el FIT jujeño mediante el bloqueo de la rotación de sus bancas en la legislatura Jujeña. Que el desembarco de los interventores se de en las vísperas de las elecciones provinciales demuestra que a estos les importa un bledo la construcción de una fuerza organizada y enraizada en la lucha de clases – sólo su carrerismo electoral.
Nuestra corriente es la principal fuerza militante, de la izquierda en la Provincia, si tenemos en cuenta las movilizaciones del último periodo, y la fuerza con mayor extensión territorial.
Desde el Partido Obrero jujeño vamos a dar la lucha en todos los campos para defender una conquista de la militancia y del activismo obrero y popular jujeño, como lo es nuestra personería electoral. Defenderemos, por sobre todo, la historia y la continuidad política del PO con nuestros métodos históricos de la clase obrera y el PO.
