Bahía Blanca: paros rotativos en el sistema municipal de salud

Escribe Emiliano Fabris

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Desde comienzos de noviembre, trabajadores de salud nucleados en la Asociación de Profesionales de la Salud Municipal (APSM) - CICOP Bahía Blanca del Hospital Municipal de la ciudad se encuentran luchando en reclamo por falta de personal en el conjunto del sistema de salud municipal, contra las condiciones laborales deficientes y exigiendo aumento de salario.

El plan de lucha comenzó con un paro de actividades el 12 y 18 de noviembre, día en el que se realizó una multitudinaria asamblea que resolvió continuar en asamblea permanente. Entre el 19 y 22 de noviembre, el Hospital debió suspender la guardia de adultos por falta de personal, que es precisamente uno de los reclamos en curso.

El 23 de noviembre, la APSM publicó un comunicado que señala: “Desde la Asociación de Profesionales de la Salud Municipal - CICOP Seccional Bahía Blanca manifestamos que, luego de meses de pandemia, seguimos con sueldos por debajo de la línea de pobreza; condiciones de trabajo agobiantes, con aumento y saturación de la demanda y falta de personal e infraestructura para afrontarla y excluidos de las paritarias por el Departamento Ejecutivo”.

El 25 de noviembre se realizó un nuevo paro de actividades. Otro tuvo lugar el 3 de diciembre, esta vez con una concurrida movilización al Municipio en donde también se sumaron trabajadores de salud del Hospital Regional Penna y trabajadores municipales de salud y otras dependencias. Una nueva asamblea resolvió convocar a un paro activo con movilización los días 13, 21 y 29 de diciembre. En los recientes días, el Municipio presentó una oferta y luego la APSM realizó una contrapropuesta en relación a la recomposición salarial del escalafón de carrera y a la incorporación de recursos humanos.

La lucha de los trabajadores del sistema municipal ha puesto de manifiesto el ajuste sobre salud que se ha llevado a cabo en plena pandemia. El gobierno municipal (Juntos por el Cambio) ha reconocido que más del 50% de los casos de COVID fueron absorbidos por el Hospital Municipal, en una ciudad donde los restantes 6 hospitales son privados. En plena “segunda ola” la guardia debió suspenderse varios días y se desafectó el funcionamiento del sistema “triage”. Muchas otras prestaciones médicas se suspendieron o postergaron. Hay salas médicas en los barrios que permanecen cerradas y se ha despido a personal. La crisis del sistema público de salud es completa, aunque también el personal de los hospitales privados se ha manifestado durante el 2020 en caravanas. El acuerdo con el FMI anticipa una profundización de este desguace del sistema sanitario con las variantes “delta” y “omicron” avanzando día a día.

Una asamblea general de todos los trabajadores del Hospital Municipal y unidades sanitarias se hace necesaria para unificar el reclamo salarial y las condiciones de trabajo. El sindicato de municipales STM, conducido por un ex candidato del Frente de Todos, se mantiene por ahora en el silencio. Este boicot puede ser superado impulsando una coordinadora de trabajadores la salud pública de la ciudad y en unidad con el resto de los estatales. Defendamos el salario, las condiciones de trabajo y la salud pública.

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