Escribe Gustavo Fenoy
Un gran paso organizativo y de combate.
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El Polo Obrero Tendencia de Capitán Bermúdez se movilizó al municipio exigiendo el cumplimiento de un pliego de reivindicaciones, entre ellas, la triplicación de la asistencia económica a nuestro comedor, bolsones de fin de año para los compañeros empadronados en nuestra organización y una partida de alimentos frescos. Alrededor de cuarenta compañeros marchamos a la sede municipal en el marco de jornadas nacionales de luchas que nuestra tendencia despliega en todo el país en defensa de un programa que tiene como horizonte estratégico: trabajo genuino, el no pago de la deuda externa y al acuerdo con el FMI y el salario igual a la canasta familiar.
Nuestros delegados fueron recibidos por el secretario del área Acción Social, a quien entregamos nuestro petitorio producto de nuestra caracterización, elaborado en la asamblea semanal.
Nuestra exigencia tiene un carácter urgente, a fin de obtener respuestas satisfactorias y el cumplimiento del compromiso del Estado ante todas las necesidades que presentan los vecinos de la ciudad.
La pandemia y su gestión capitalista ha dejado un cuadro de miseria social que no para de crecer. Más de la mitad de la población vive en la pobreza y la indigencia. Denunciamos la responsabilidad política de los gobiernos nacionales, provinciales y municipales que tienen sobre esta situación y combatimos su orientación ajustadora. La escalada inflacionaria hace insostenible la vida para quienes vivimos de nuestro trabajo. La canasta familiar se ha elevado a más de cien mil pesos. Los planes sociales, -hoy en la mitad del salario mínimo, es decir $ 16.000- se pulverizan con el aumento incesante de la canasta familiar. Esta realidad desesperante se complementa con un aumento exponencial del desempleo y del trabajo precario, que deja a las familias trabajadoras en condiciones de mayor miseria.
Este cuadro se agudiza día a día en los barrios de nuestra ciudad, para enfrentar el hambre y luchar por trabajo digno nuestra organización sale a exigir al Estado una respuesta inmediata.
No daremos un paso atrás en exigir al Estado todo lo que nos corresponde y nos organizamos de manera. Tal caracterización y exigencia tuvo como norte nuestra movilización y concentración.
Finalmente arrancamos un compromiso del Estado municipal frente a nuestros reclamos y votamos volver el miércoles para hacer efectivo ese compromiso y de no hacerse habría acampe.
La nueva concentración del miércoles pudo arrancarle al municipio la triplicación de la asistencia, bolsones de fin de año y la entrega de alimentos frescos para asistir al comedor. Quedo pendiente una nueva reunión para avanzar en la entrega de utensilios, heladera y elementos de bioseguridad para la primera semana de enero.
Nuestra organización viene dando pasos en su estructuración y es parte de una tendencia más general de intervención de los desocupados para enfrentar la miseria social, la crisis política y el ajuste de todo el arco político patronal.
Frente a un escenario explosivo, de escalada inflacionaria, de aumentos de servicios, del crecimiento alarmante de casos covid y donde la mitad de nuestra población vive en la pobreza el polo obrero tendencia se abre paso para enfrentarlo junto a los trabajadores estatales, los docentes y los obreros fabriles.
Vamos por un 2022 donde los trabajadores impongan una salida a la crisis y gobiernen.