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Personal de enfermería contratado por el gobierno de la ciudad de Buenos Aires para atender la pandemia -cerca de 4.000 trabajadores- está siendo dado de baja compulsivamente. La resolución responde a la determinación de los gobiernos nacional y provinciales de dar por concluida la pandemia y mantener el sistema de salud público con la dotación de personal reducida al máximo, como antes de 2020.
Tras dos años de un intenso trabajo en la primera línea contra el Covid-19, con sueldos miserables por debajo de la canasta de pobreza, sobrecarga laboral, sin licencias ni vacaciones, trabajando al límite de sus fuerzas con contratos precarios, con elementos de protección de mala calidad, cerca de 4.000 trabajadores están siendo despedidos por Larreta y Quirós.
El gobierno porteño había resuelto los despidos masivos el año pasado, pero tuvo que posponerlos en diciembre, cuando otra ola de Covid azotó a la ciudad y tomó por sorpresa al gobierno, que se encontraba cerrando postas de vacunación y testeo. La enorme demanda en los hospitales generó una crisis que movilizó denuncias y fuertes reclamos de los trabajadores y autoridades en los hospitales.
Larreta no solo tuvo que posponer los despidos, sino que tuvo que convocar a concurso, es decir un llamado a evaluación, para incorporar a 1.100 trabajadores a planta permanente. La respuesta fue desbordante: 5.000 trabajadores se presentaron en el hospital Muñiz para inscribirse.
El gobierno de Larreta pretende dar por concluida la pandemia cuando en estos días se produce un intenso rebrote en China y Japón, alertando que la pandemia no ha terminado. Los despidos sólo pueden ejecutarse con el aval de Sutecba. Por su parte, la conducción de ATE Capital no ha se pronunciado.
Los trabajadores denuncian que los 1.100 trabajadores pasados a planta apenas cubren las bajas de los compañeros fallecidos durante la pandemia o jubilados. No son solo los contratados los que están siendo despedidos, hay un tendal de trabajadores de distintos hospitales que están siendo cesanteados (despidos justificados) por no poder cumplir con las rotaciones y cambios de horarios, que disponen las autoridades para cubrir los enormes faltantes de personal.
Pase a planta del conjunto de los contratados por pandemia. Abajo las paritarias de hambre que firma la burocracia de Sutecba con la complicidad de ATE. Aumento urgente del 100% del salario, jornada laboral de 6 hs para todo el personal por insalubridad, basta de violencia institucional y pase a la carrera profesional del conjunto de enfermería. Organicemos la lucha en cada hopsital.
