Adelantamiento de paritarias, un operativo contra el salario

Escribe Jacyn

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El acuerdo de la UIA y la CGT, patrocinado por el gobierno para adelantar las paritarias, ha comenzado a tomar forma con el acuerdo sellado por el Sindicato de Comercio. El gobierno le ha dado amplia difusión.

El 59,5% acordado por Cavalieri marca la pauta de las ´negociaciones´. Detrás del anuncio de un porcentaje ´impactante´, se consolida la confiscación salarial de los últimos años, que se ha devorado aproximadamente un 15-25 % del poder adquisitivo de los salarios. Un empleado de comercio recibirá en mano 139 mil pesos recién en enero del año 2023, una cifra que hoy ya se ubica por debajo del costo de la canasta familiar. El pago en cuotas, además, es gravoso para los trabajadores, pues las cuotas no se acumulan sino que se aplican sobre el salario vigente en la actualidad. Por otro lado, el acuerdo perpetúa las cifras ´no remunerativas´, que hoy representan aproximadamente el 30% del salario neto de un empleado de comercio, mientras que, en general, los básicos son raquíticos en relación al salario ´conformado´. El verdadero ´piso´ para una negociación salarial debería partir de un incremento del 60% en una sola cuota y la absorción de todas las cifras al básico para, a continuación, discutir un salario mínimo equivalente al costo de la canasta familiar, que hoy se ubica en aproximadamente 190 mil pesos, considerando el alquiler de la vivienda – un ítem que la estadística oficial no contempla a pesar de que el 35 % de las familias argentinas son inquilinas y ese porcentaje trepa entre los más jóvenes.

Esta operación contra el salario involucra a toda la burocracia sindical. En el caso de bancarios, que encabeza la Corriente Federal, Palazzo ha anunciado un paro por el 60% de incremento. El porcentaje reclamado lo ubica en el umbral establecido por Cavalieri sin despeinarse. A los bancos les salen pesos por las orejas. Los banqueros han hecho grandes negocios en pesos, aprovechando las altas tasas de interés. Es evidente que un incremento del 60% no representa para ellos un mayor esfuerzo. La mayoría de los empleados bancarios, en cambio, son afectados por el impuesto a las Ganancias, como ocurre con todos los salarios que superen aunque sea por poco la línea de la canasta familiar. Palazzo, relegado de la conducción de la CGT por su filiación kirchnerista, apunta a preservar su ´espacio´ con un reclamo que no desentona de la tónica marcada por el gobierno fondomonetarista.

Otros sectores de la burocracia han alineado sus reclamos con los de las patronales de sus gremios. Es el caso de Sanidad, Héctor Daer ´reclama´ un 45 % en cuotas y una renegociación en agosto. Las clínicas, por su parte, ponen como condición que el gobierno autorice un aumento de las cuotas que cobran a sus afiliados y de los aranceles de las prepagas y el PAMI, además de una serie de ventajas impositivas. De forma similar actúa la UTA, encolumnada detrás de los reclamos de mayores subsidios y tarifazos en el transporte.

En su primera reunión del año, en el Consejo Directivo de la CGT se habló poco del salario y las paritarias y mucho, en cambio, de los fondos de las obras sociales que retiene el gobierno. El divorcio de la CGT con los trabajadores no podría ser más completo. En el cónclave, además, quedó al desnudo el bluff de la ´renovación´ cegetista, con la presencia del metalúrgico Furlán, al cual algunos sindicaban como ´camporista´.

La ´desindexación´ de salarios y jubilaciones es una pieza fundamental de la línea económica del gobierno, que pretende ir morigerando mediante bonos que actúan como ´reintegros´ a término de un porcentaje de lo confiscado. Es el único precio ´controlado´: la inflación es funcional a la licuación de las deudas en pesos del Estado y del déficit fiscal mediante el incremento de la recaudación. De este modo, Guzmán ha podido exhibir el ´sobrecumplimiento´ de las metas fiscales acordadas con el FMI. La burocracia sindical juega un rol fundamental en esta operación contra los ingresos de trabajadores y jubilados.

Si la intervención de los trabajadores en la crisis se demora esto se debe al rol de la burocracia en todas sus variantes, lo cual, sin embargo, no le ha ahorrado crisis y ´renovaciones´ - de burócratas quemados por algunas caras nuevas. Reclamarle “planes de lucha” es una vía muerta.

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