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A dos semanas del quinto aniversario del femicidio de Luna Ortiz, se notificó a su familia que el Tribunal Oral Criminal N°7 otorgó el beneficio de la libertad solicitado por la defensa al único detenido por su asesinato, Isaías Villarreal. Los jueces Alejandro Lago, Alberto Gaig y Maria Coelho Lago han resuelto liberar a un femicida, luego de que los jueces de la cámara de Casación de La Plata, Daniel Alfredo Carral, Ricardo Ramón Maidana y Ricardo Borinsky dictaran un fallo que cambiaba la carátula a homicidio culposo, en un texto aberrante donde, nuevamente, se responsabiliza a la víctima de su muerte.
Para el movimiento de mujeres de zona norte este grado de misoginia e impunidad lamentablemente no sorprende. Las redes de trata y de narcos actúan con total complicidad de todas las instituciones del Estado, desde el municipio hasta la justicia. No sólo el femicidio de Luna naufraga por el río de la impunidad, también el de Micaela y Nancy Fernández o el de Tamara López; hace 16 años buscamos a Viviana Altamirano y ya van 2 años sin Valeria López. Todas de San Fernando y Tigre, los famosos distritos de las cámaras y la "seguridad". A Luna la vieron esas cámaras siendo arrastrada casi desvanecida por Villarreal, la noche del 2 de junio de 2017, sin despertar alarma del Centro de Operaciones de Tigre. No sólo eso, su cuerpo, encontrado sin vida en la casa de la tía de Villarreal, fue negado para el reconocimiento de su familia por el fiscal Marcelo Fuenzalida, y pudieron encontrarse recién mas de 24 hs después y ya en la funeraria, donde la habían lavado y maquillado. Fuenzalida, quién fue separado de la Fiscalía especializada en Trata de Gral. Pacheco (Tigre), lo han vuelto a habilitar como fiscal en esta nueva instancia del TOC7, esta vez en la Fiscalía homónima de San Isidro, que termina con la libertad de Villarreal. Las familias de las víctimas viven en verdadero calvario, un infierno eterno donde se mata en vida y se sigue matando en la muerte.
Cuando decimos que "el Estado es responsable" no es sólo una denuncia enunciativa. La violencia contra las mujeres se sostiene desde el Estado capitalista mediante este mecanismo de la impunidad más absoluta. Nos matan porque pueden, porque nuestro sometimiento es un beneficio para el control social, pues las mujeres somos la mitad de la clase obrera. No hay reforma de leyes o curso de perspectiva de género que modifiquen el rol social de la justicia burguesa. Hay que tener esto muy claro porque tener expectativas de que el sistema capitalista puede ser modificado para mejorar las condiciones de vida de las mujeres sólo nos va a llevar a la desmoralización. Este fallo también es un intento de desmoralizarnos, un golpe a un movimiento de mujeres de la zona norte que se organizó desde el día uno, en asambleas y radios abiertas, que realizó todo tipo de acciones y cortó la Av. Centenario los días que duró el juicio de primera instancia y logró arrancar en ese momento los 14 años a Villarreal. Esta misma semana, nos enterábamos que la fiscal Liliana Tricarico apelaba contra la absolución de Higui. Es una avanzada contra nuestros derechos que no es sólo local, sino que se desarrolla en todo el mundo, como el ataque a las conquistas del aborto legal y la educación sexual en EEUU, al calor de la crisis de un capitalismo en guerra.
Esta escalada reaccionaria contra las mujeres, también se da en un momento donde la lucha y organización de las mismas va en crecimiento en todo el mundo. Las mujeres trabajadoras hemos protagonizado las movilizaciones más masivas del país en los últimos años y estamos a la cabeza de la lucha en muchas de las rebeliones que estallaron en distintas partes del mundo. Es por eso que tenemos que sacar conclusiones y redoblar la organización. Luchar más y con fuerza, no sólo para no dejar pasar que liberen a los femicidas y arrancar la justicia para nuestras compañeras, sino también para tirar de una vez por todas este régimen social que no tiene más para ofrecernos que esta barbarie.
Este martes 24/5, nos reunimos para debatir y organizar acciones de lucha, de cara al 3J, a las 18 hs en San Fernando (3 de Febrero 295).
Abajo la libertad para el femicida Isaías Villarreal. Destitución de los jueces y fiscales que fomentan la violencia contra las mujeres. Justicia por Luna. No nos vamos a cansar de gritar que fue femicidio.
