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Mientras las noticias daban a conocer a la población el índice de inflación de junio, que superó el 5% y que alcanzó un 64% interanual, una cantidad enorme de contingentes de la clase explotada paralizó la Capital Federal y se movilizó por sus reclamos. Las columnas de la Unidad Piquetera, convocante de la marcha, partieron desde distintos puntos de la 9 de Julio y confluyeron en la Plaza de Mayo donde reclamaron una reunión con la ministra de economía, Silvia Batakis, y el pago de un bono extraordinario de $20.000. Según diversos medios, se trató de la movilización más grande de los desocupados de los últimos tiempos.
La consigna central de la Unidad Piquetera que encabezó la marcha fue “Derrotemos el Ajuste”. Otras consignas centrales fueron “¡Fuera el FMI! Por trabajo y por salario, contra el hambre y la pobreza; basta de criminalizar a los que luchamos”. Algunos carteles planteaban un paro nacional. Desde el ministerio no dieron respuesta alguna al reclamo.
La movilización se replicó en distintas provincias del interior del país. En Santiago del Estero, la policía de Gerardo Zamora reprimió la manifestación y se llevó detenido a un referente del Polo Obrero oficial, que a las horas fue liberado. Durante la larga jornada de lucha que se extendió hasta entradas las 18hs, la Unidad Piquetera realizó muestras de los “trabajos productivos” que realizan las organizaciones y otro tipo de actividades.
Al concluir la jornada, se realizó un acto donde se leyó una resolución de la mesa nacional de la Unidad Piquetera que proponía levantar la permanencia en Plaza de Mayo. La misma resolución planteaba “continuar el plan de lucha a partir de la propuesta que hicieron los compañeros de la UTEP [Grabois] para planificar una jornada de lucha contra la criminalización de la lucha social y la pelea por el otorgamiento de un refuerzo de $20.000 para los trabajadores monotributistas y categorías más bajas, jubilados y compañeros que cobran Potenciar Trabajo”. Con esa única resolución concluyó la acción de lucha.
Mañana se realizará una reunión entre la UTEP de Grabois y dirigentes de la Unidad Piquetera. Los lazos se afianzaron en la movilización de hoy, donde dirigentes de ambos sectores se hicieron visitas mutuas. El 'Chino' Navarro, el 'Gringo' Castro, Alderete (CCC) y otros se acercaron a la Plaza de Mayo y dieron su apoyo a la Unidad Piquetera. Estos mismos dirigentes participaron ayer mismo en una reunión de urgencia en la Casa Rosada con Alberto Fernández, quien se “solidarizó” con las organizaciones sociales. Por su parte, los dirigentes de la UP se acercaron a las inmediaciones de Congreso Nacional donde las organizaciones oficialistas realizaban una muestra de la 'economía popular'.
En el acto de cierre de la Unidad Piquetera, con diversas críticas al gobierno, los dirigentes remarcaron la importancia de la unidad que se está forjando. Belliboni, del Polo Obrero oficial, sostuvo que “nos vamos a unir a todos los trabajadores que quieran salir a luchar, no me importa la ideología que tengan, nunca nos dividió lo que piensan los compañeros de Barrios [De Pie], del MST, del FOL. Llamamos a la más amplia unidad”. Obviamente no sé trata "de lo que 'piensan' los compañeros, sino de los intereses de clase de las corrientes que se arriman a las marcha en función de su política. Finalmente, se hizo un nuevo llamado a la CGT y la CTA a que rompan con el gobierno y salgan a luchar.
La masividad de la movilización de hoy dejó en claro que el cierre de los cupos por parte de Desarrollo Social no hizo menguar la organización y lucha de los desocupados, sino que la ha acicateado. La crisis económica está empujando a un sector de los explotados a ganar las calles más que nunca, en medio de un disgregamiento del gobierno. Se hace patente la necesidad de una huelga general. El Congreso del Polo Obrero Tendencia, del próximo sábado, discutirá este escenario del movimiento obrero y tomará resoluciones para intervenir con un programa que plantee una perspectiva de poder para el movimiento obrero.
