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El FITU ha logrado superarse a sí mismo con su abstención en el Congreso a la hora de votar el proyecto de declaración contra el atentado sufrido por Cristina Kirchner.
La declaración, aprobada por unanimidad, además de expresar el “enérgico repudio al intento de magnicidio”, agrega que éste “empaña la vida en democracia” y finalmente exhorta “a la dirigencia toda y a la población a buscar todos los caminos que conduzcan a la paz social". La declaración fue aprobada una vez que el bloque oficialista abandonó su pretensión de incluir en la condena a los “discursos de odio”, como figuraba en el proyecto de la massista Cecilia Moreau. La declaración fue votada favorablemente incluso por Javier Milei, que en las horas posteriores al atentado no había abierto la boca.
El FITU, en cambio, había presentado su propio proyecto donde condenaba el atentado, sin dar apoyo político al “gobierno del ajuste”. Pero una vez que kirchneristas, macristas, radicales, lilitos y libertarianos se pusieron de acuerdo, el FITU se abstuvo en lugar de votar en contra de la “paz social”. Anuló en la práctica el contenido de su proyecto de declaración política.
Es la primera vez que una corriente que se declara partidaria de la IV Internacional se abstiene frente a un llamado a la unidad nacional. La unión nacional y la paz social son llamados a la colaboración de clases e incluso a la integración al Estado. La abstención equivale a un apoyo ‘crítico’ al pacto entre kirchneristas y macristas, y relega la declaración del FITU al tacho de basura. Para Romina del Plá, “no están en juego la democracia y la paz social”: los ataques constantes del gobierno y las patronales a la clase obrera y la misma lucha de clases, está afuera del temario.
Mientras tanto, en la legislatura porteña, los legisladores del FITU votaban favorablemente junto a los bloques del PRO, la CC y el kirchnerismo, una declaración redactada por el presidente de la bancada K, donde se plantea que “la democracia fue desafiada y todos los ciudadanos y ciudadanas debemos expresarnos decididamente contra este horrible hecho y contra cualquier tipo de acciones y discursos que hagan peligrar nuestra convivencia y nuestra paz social” (Página 12, 4/9). En este caso, el que se abstuvo fue el libertariano Ramiro Marra.
